20 de junio de 2012

HISTORIA DEL CORREO EN CUBA


Historia del Correo en Cuba 

Con una población cercana a los 140,000 habitantes en el año 1754, la Isla había creado sus propias necesidades postales, lo que dio lugar a que por Real Orden de 26 de agosto de 1754, se autorizara la creación del servicio de Correo Interior, por cuenta y riesgo de la Hacienda Pública.


Dos años más tarde, el 1 de marzo de 1756, se autorizaba la implantación y desarrollo de un «Correo entre La Habana y Santiago de Cuba» estableciéndose con ello La Primera Ruta Postal en Cuba.

Desde La Habana y con destino al transporte interior de la Isla, se habilitaronn  caminos con Postas o casas situadas en diversas haciendas para atender y prestar servicios de correos, alimentación, reposición de bestias, carruajes, etc.  Con tiempo favorable, el viaje a caballo o con carreta tirada por bueyes podía demorar un mes aproximadamente entre La Habana y Santiago de Cuba..

Durante los años 1764 y 1792 fueron creadas las siguientes administraciones postales: Guanabacoa, San Juan de los Remedios, Santa María del Rosario, Jaruco, Matanzas, Villa Clara, Sancti Spiritus, Trinidad, Puerto Príncipe, Bayamo y Santiago de Cuba.

Ocho años más tarde, el 6 de agosto de 1764, el Rey Carlos III expidió una Real Cédula creando los «Correos Marítimos del Estado». Varios días después, el 24 de agosto, se promulgaba su reglamento, estableciéndose por el mismo la «Administración Principal de Correos de La Habana» regida y supervisada nuevamente por el estado.

 El Real Decreto  dispuso también que mensualmente saliese del puerto de La Coruña para el de San Cristóbal de la Habana un paquebote con toda la correspondencia para Yndias y, a su regreso, llevara la que hubiese disponible para España.

España mantuvo por décadas los puertos de Cuba cerrados al comercio exterior, estando solo permitida la entrada a puertos cubanos a los barcos españoles. Para evitar ataques y saqueos de piratas y corsarios, los barcos que transportaban la correspondencia eran escoltados por galeones de guerra.

 Posteriormente se levantaron las restricciones al comercio exterior, y en el año 1843 entraba en el puerto de La Habana el primer vapor procedente de Europa, un paquebote inglés, con correspondencia de ese continente. Para el año 1850   los buques de vela fueron sustituidos por  vapores y este cambio fue muy significativo para las comunicaciones postales entre la Isla y las principales ciudades de Europa y América.

Por otra parte, el 19 de noviembre de 1837 se estableció la primera línea de ferrocarril en Cuba entre La Habana y Bejucal y en 1851 la línea Camagüey-Nuevitas.  A partir de 1839 se comenzaron a utilizar las ventajas del transporte ferroviario para el acarreo postal.

En el año 1851 se le concedió al señor Samuel Kennedy autorización para establecer una línea telegráfica en La Habana, en el tramo comprendido entre el teatro Villanueva y la plaza Monserrate.  Dos años después, se establecería la línea La Habana-Bejucal y a partir de ese mismo año, una verdadera red de líneas telegráficas se extendió a todo lo largo y ancho de la Isla. Cabe notar el hecho que el servicio telegráfico, al igual que el servicio ferroviario, fue implantado en Cuba primero que en España.

Por Real Decreto de 18 de diciembre de 1854 se estableció que toda la correspondencia entre España y Ultramar (Cuba, Puerto Rico y Filipinas) fuese pagada por medio de sellos de correos. Y por otro Real Decreto de 15 de febrero de 1855 se determinó el uso obligatorio de los mismos para el franqueo previo de toda correspondencia. Este fue un cambio bastante radical pues anteriormente las cartas circulaban sin sellos y era el destinatario quien pagaba el franqueo al recibirlas.

Para el 20 de abril del propio año se anunciaba la venta de sellos de la primera emisión para ser usada en Cuba y, para fines del mismo mes toda la correspondencia originada en Cuba circuló por primera vez con sellos de correos.

El 15 de noviembre de 1855 se publicó en la Gaceta Oficial la inauguración del Correo Interior de La Habana, lo que traería aparejado un notable desarrollo de las comunicaciones postales de la ciudad, en particular las del sector comercial.

Terminada la guerra cubanohispanoamericana y establecido el gobierno militar de EE.UU. en Cuba en 1898, el mismo se dio a la tarea inmediata de implantar verdaderas mejoras en los servicios postales y de comunicaciones. Importantes cambios fueron establecidos, siendo los principales la separación de los servicios de correos y telégrafos, implantación de Oficinas Postales Ambulantes, utilizándose para las mismas las líneas marítimas y ferroviarias en operación; la instalación de mayor número de apartados postales; la modificación de la tarifa de franqueo del servicio interior; la promulgación del Código Postal; creación de los servicios de Rezagos y mejoras en los servicios de Certificados.

Las mejoras en los servicios postales introducidas durante la intevención estadounidense fueron aprovechadas y continuadas por las nuevas autoridades. Con la instauración de la República el 20 de mayo de 1902, y por Decreto Ejecutivo Nacional se dispuso la creación de la Dirección de Comunicaciones dentro de la Secretaría de Gobernación, la cual asumiría la dirección ejecutiva y administrativa de los servicios de Correos y Telégrafos.

El 9 de diciembre de 1902 el Ferrocarril Central inauguró el servicio directo entre La Habana y Santiago de Cuba con un recorrido de 869 kilómetros. Esta ruta ferroviaria y todos los ramales que la conectaban fueron utilizados, en su inmensa mayoría, para el transporte, clasificación, distribución y entrega de toda la correspondencia interior, así corno también la destinada al extranjero.  Asimismo, la Carretera Central, órgano vital de las comunicaciones para toda la Isla, construida en la década de los años treinta a un costo de $111 millones, fue un factor determinante en el mejoramiento del servicio postal en Cuba.

El 16 de enero de 1921 la recién fundada Compañía Aérea Cubana realizó un vuelo experimental entre La Habana y Camagüey. En él viajaba   un empleado del correo con un fardo de correspondencia, pero este vuelo resultó un fracaso y solo quedó como vuelo experimental para el transporte de la correspondencia por vía aérea. No fue hasta los años de 1928 a 1932 cuando se establecieron regularmente los servicios de correos por Vía Aérea, extendiéndose desde La Habana hasta Baracoa, en el extremo oriental de la Isla.

Fuentes: www.philat.com & Postales Principeñas, Regino Avilés Marín, Boletín Diocesano Camagüey Nº 102

No hay comentarios:

Publicar un comentario