5 de mayo de 2012

5 DE MAYO, LA BATALLA DE PUEBLA


Cinco de Mayo:
La Batalla de Puebla


El Cinco de Mayo es una fecha significativa en la historia de México: la Batalla de Puebla. Marca la primera vez que el Ejército Mexicano pudo derrotar a una potencia extranjera mejor preparada como lo fueron los franceses. La batalla tuvo lugar en la actual ciudad de Puebla de Zaragoza el 5 de mayo de 1862, entre los ejércitos de México y Francia.

En junio de 1861, el Congreso mexicano, a iniciativa del presidente Benito Juárez, había declarado la suspensión por un lapso de dos años del pago de la deuda internacional. España, Inglaterra y Francia, los principales acreedores, protestaron ante esa medida; sin embargo, Inglaterra y España lograron negociar por la vía diplomática los términos y condiciones en los que se pagaría la deuda posteriormente.

Napoleón III, gobernante de Francia, decidió invadir México para establecer una monarquía favorable a Europa. Con ese fin, debía disolver el Gobierno Constitucional de Juárez y colocar a un rey que respetara su autoridad, eligiendo para ello a Maximiliano de Habsburgo, que no podía aspirar al trono del Imperio Austriaco.

En abril de 1862 los franceses desembarcaron en Veracruz, y emprendieron la campaña militar hacia el centro de la República. La primera batalla importante tuvo lugar en Acultzingo, en el límite de los Estados de Veracruz y Puebla. El héroe de la batalla de Puebla fue el general Ignacio Zaragoza. El informe que el general Zaragoza rindió sobre la Batalla de Puebla al Presidente Benito Juárez fue breve y significativo:

«Las armas nacionales se han cubierto de gloria. Las tropas francesas se portaron con valor en el combate y su jefe con torpeza».

A pesar de ser técnicamente desconocido en México, donde es un día en el que no se suspenden labores, el Cinco de Mayo es celebrado por los mexicanos en los Estados Unidos como el Día del Orgullo Mexicano, con mariachis, corridas de toros, y es confundido por los estadounidenses como el Día de la Independencia de México.

Texto: Wikipedia.org
Foto: Google, autor desconocido.

FRASE DE SABIDURÍA

La primera virtud es frenar la lengua, y es casi un dios quien teniendo razón sabe callarse.
- Catón de Útica

4 de mayo de 2012

ZENAIDA MANFUGÁS



Zenaida Manfugás,
manos de luz sobre el teclado

Entrevistó: Ana Viñas
Texto: Baltasar Santiago Martín. Fundación Apogeo
(para el blog Gaspar, El Lugareño)


Zenaida Manfugás, una de las pianistas más respetadas y admiradas por los cubanos y en el mundo, nació en Guantánamo, ciudad pródiga en talentos aunque no tan reconocida por ello como Matanzas o Guanabacoa. Gracias al apoyo y visión de su madre, gran pianista y una adelantada de la pedagogía moderna, pudo descubrir desde temprano su vocación por el piano, pues su progenitora se empeñó en enseñar a tocarlo a todas sus hijas a partir del mismo día en que cumplían los 5 años, y ya a los siete, Zenaida tocaba dos conciertos: el de la Coronación y el Primero de Beethoven.

En un medio hostil, indiferente, clasista, y por ende, racista, transcurrieron 9 años de lucha y batallas, y al fin, ya adolescente, gracias al tesón obsesivo del Maestro Gonzalo Roig, que la apoyó sin reservas, al igual que Ernesto Lecuona, debutó en 1949 como pianista en el Anfiteatro de la Avenida del Puerto, con la Banda Municipal de La Habana, tocando el Concierto en La Menor de Grieg, con un arreglo del propio maestro Roig.

El Maestro Gonzalo Roig afirmaba que Zenaida Manfugás era la mejor intérprete de la música cubana, y una de las mejores pianistas que había dado Cuba, y el propio Lecuona la consideraba también como la mejor intérprete de su música, por el especial talento con que ejecutaba sus composiciones.

Gastón Baquero escribió en las páginas del Diario de la Marina: “Zenaida Manfugás interpreta ya a los grandes maestros con tanta alma, con tanta elegancia, que no se necesita ser un técnico de la apreciación musical para comprender que se tiene delante a una promesa genuina". Y añadía: “Conmovía verla ante el piano, desarrollando la difícil y austera estructura de un Haydn, o la tremenda espiritualidad de Federico Chopin”.

Cursó luego estudios en el Conservatorio Municipal, y obtuvo una beca del Ministerio de Educación para estudiar en España, pero pasaron más de 3 años antes de que pudiera viajar.

En 1952 matriculó al fin en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, donde tuvo como profesor, entre otros, al reconocido Tomás Andrade de Silva. En la Madre Patria tuvo en 1955 a su único hijo, Andrés Montes, que con los años se convertiría en uno de los periodistas deportivos más populares de la radio y la televisión en España, fallecido en el 2009, a los 53 años.

En España, Zenaida logró realizar todo lo que no pudo hacer en su país natal, donde, a pesar de contar con el apoyo de músicos del prestigio de Gonzalo Roig y Ernesto Lecuona, encontró muchas trabas por su condición de mujer, negra y pobre.

En 1958 regresó a Cuba, donde desarrolló una significativa actividad como pianista, y en ocasiones acompañó a las mejores orquestas clásicas como la Orquesta Sinfónica Nacional y la Orquesta de Cámara Nacional. Fue muy aplaudida también en todos los países en que se presentó, tanto en Europa como en Asia.

Radicó su residencia en 1974 en Estados Unidos, donde se ha presentado en plazas tan selectas como el Carnegie Hall de Nueva York, y también trabajó como solista con la Orquesta Sinfónica del Nuevo Mundo, radicada en Miami Beach.

Ha sido además profesora del Kean College, de Nueva Jersey, donde impartió clases de Historia de la Música, y grabado varios discos en vivo, sin el apoyo de ningún sello disquero, donde recoge algunas de sus magníficas interpretaciones de los compositores cubanos, cuya obra tanto ha contribuido a divulgar.

Hace ya más de cincuenta años el destacado intelectual cubano Jorge Mañach escribió en el Diario de la Marina:
“Antier, en la Casa Cultural de las Católicas, Zenaida Manfugás tocó 'como los ángeles' en más de un sentido. Quiero decir que se hizo ella misma incorpórea, mera presencia musical. Ni siquiera se deslizaron en sus modos de interpretación aquellos acentos que una crítica sobreaguda suele asociar a su raza —la exuberancia, la voluptuosidad en el regodeo melódico, cierto íntimo patetismo superpuesto. Fue (hasta donde se le alcanza a quien sabe poco de estas cosas) música de una gran sobriedad, castidad, pureza interpretativa; esa música que no cae en los engreimientos a medias y que, por consiguiente, sólo se escucha en la etapa reveladora o en la etapa ya muy gloriosa de los grandes talentos”.
Afortunadamente, en este año 2010 que ya casi llega su fin, todos esos atributos de la pianista refrendados por Mañach siguen intactos; después de escucharla, si la música es la voz de Dios, no nos quedarán dudas de que las manos prodigiosas de Zenaida sobre el teclado son las cuerdas vocales de su garganta.


—Zenaida, desgraciadamente el racismo que tanto la afectó al inicio de su carrera todavía no ha desaparecido de la mente de muchos cubanos ni de la sociedad actual, ¿cuál fue su recurso para lograr imponerse en aquella época tan clasista y prejuiciosa, y que los jóvenes talentos negros de hoy pudieran tomar como ejemplo a seguir?

—Mi madre siempre nos decía: —“Los pies en la tierra y la cabeza en las alturas”; a lo intermedio no hay que hacerle mucho caso, para que nada te distraiga en el logro de tus metas, y creo que así fue como logré imponerme.

— ¿Quiénes son sus héroes de la vida real?

—Admiro a Martin Luther King, que con su filosofía de la “no violencia” —a diferencia de Malcolm X—, fue el que consiguió la victoria en la lucha por los derechos civiles de los negros norteamericanos.

— ¿Cuál considera que es su mejor cualidad?

—La sencillez, creo que esa es mi mejor cualidad.

— ¿Hay algo que se reprocha en la vida?

—No haber podido grabar discos profesionalmente para que quedara registrada así mi música para la posteridad, pues las pocas grabaciones que tengo fueron hechas con una grabadorita “mikimouse”, no con un sello disquero en un estudio con todas las condiciones adecuadas.

— ¿Quiénes son sus compositores preferidos?

—“Las tres B”: Johann Sebastian Bach, Beethoven y Johannes Bhrams, y Federico Chopin, que fue un innovador del Romanticismo.

— ¿Quiénes son sus escritores favoritos?

—Mis autores preferidos son José Ortega y Gasset, y Miguel de Unamuno. Prefiero leer a tocar música; entre la lectura y la música, me quedo con la lectura.

— ¿Cuál considera que ha sido mayor logro personal?

—Quieran o no quieran, yo pertenezco a la cultura cubana.

— ¿Cómo le gustaría que la recordaran?

— ¿Y usted cree que me van a recordar?; ojalá que de verdad me recuerden, por mis interpretaciones y por mi personalidad; todo el que me trata me quiere.

Entrevista publicada en el blog Gaspar, El Lugareño, en 2010. Colaboración de Jorge Duarte
Zenaida Manfugás acaba de fallecer este miércoles 2 de mayo en Elizabeth, Nueva Jersey. Descanse en paz esta viruosa pianista, figura cimera en la historia musical cubana.

EL PROFETA HABLA DE LOS CUBANOS

El Profeta habla 
de los cubanos

Luis Aguilar León

Desde una roca en el puerto, El Profeta contemplaba la blanca vela de la nave que a su tierra había de llevarlo. Una mezcla de tristeza y alegría inundaba su alma. Por nueve años sus sabias y amorosas palabras se habían derramado sobre la población. Su amor lo ataba a esa gente. Pero el deber lo llamaba a su patria. había llegado la hora de partir. Atenuabas su melancolía pensando que sus perdurables consejos llenarían el vacio de su ausencia.

Entonces un político de Elmira se le acercó y le dijo: Maestro, háblanos de los cubanos.

El Profeta recogió en un puño su alba túnica y dijo:

"Los cubanos están entre vosotros, pero no son de vosotros. No intentéis conocerlos porque su alma vive en el mundo impenetrable del dualismo. Los cubanos beben de una misma copa la alegría y la amargura. Hacen música de su llanto y se ríen con su música. Los cubanos toman en serio los chistes y hacen de todo lo serio un chiste. Y ellos mismos no se conocen." 

"Nunca subestiméis a los cubanos. El brazo derecho de San Pedro es cubano, y el mejor consejero del Diablo es también cubano. Cuba no ha dado ni un santo ni un hereje. Pero los cubanos santifican entre los heréticos y heretizan entre los santos. Su espíritu es universal e irreverente. Los cubanos creen simultáneamente en el Dios de los católicos, en Changó, en la charada y en los horóscopos. Tratan a los dioses de tú y se burlan de los ritos religiosos. Dicen que no creen en nadie, y creen en todo. Y ni renuncian a sus ilusiones, ni aprenden de las desilusiones." 

"No discutáis con ellos jamás. Los cubanos nacen con sabiduría inmanente. No necesitan leer, todo lo saben. No necesitan viajar, todo lo han visto. Los cubanos son el pueblo elegido ... de ellos mismos. Y se pasean entre los demás pueblos como el espíritu se pasea sobre las aguas."

"Los cubanos se caracterizan individualmente por su simpatía e inteligencia, y en grupo por su gritería y apasionamiento. Cada uno de ellos lleva la chispa del genio, y los genios no se llevan bien entre sí. De ahí que reunir a los cubanos es fácil, unirlos imposible. Un cubano es capaz de lograr todo en este mundo menos el aplauso de otro cubano." 

"No les habléis de lógica. La lógica implica razonamiento y mesura, y los cubanos son hiperbólicos y desmesurados. Si os invitan a un restaurante, os invitan a comer no al mejor restaurante del pueblo, sino "al mejor restaurante del mundo". Cuando discuten, no dicen "no estoy de acuerdo con usted", dicen "usted está completa y totalmente equivocado". 

"Tienen una tendencia antropofágica. "Se la comió", es una expresión de admiración, "comerse un cable", señal de situación crítica y llamarle a alguien "comedor de excrementos", es su mas usual y lacerante insulto. Tienen voluntad piromaniaca, "ser la candela" es ser cumbre. Y aman tanto la contradicción que llaman a las mujeres hermosas "monstruos" y a los eruditos "bárbaros"; y cuando se les pide un favor no dicen "si" o "no", sino que dicen "sí, como que no". 

"Los cubanos intuyen las soluciones aún antes de conocer los problemas. De ahí que para ellos "nunca hay problema". Y se sienten tan grandes que a todo el mundo le dicen "chico". Pero ellos no se achican ante nadie. Si se les lleva al estudio de un famoso pintor, se limitan a comentar "a mí no me dio por pintar". Y van a los médicos, no a preguntarles, sino a decirles lo que tienen." 

"Usan los diminutivos con ternura, pero también con voluntad de reducir al prójimo. Piden "un favorcito", ofrecen "una tacita de café", visitan "por un ratico", y de los postres solo aceptan "un pedacitico". Pero también a quien se compra una mansión le celebran "la casita" que adquirió, o "el carrito" que tiene a quien se compró un coche de lujo." 

"Cuando visité su isla me admiraba su sabiduría instantánea y colectiva. Cualquier cubano se consideraba capaz de liquidar al comunismo o al capitalismo, enderezar a la América Latina, erradicar el hambre en Africa y enseñar a los Estados Unidos a ser potencial mundial. Y se asombran de que las demás gentes no comprendan cuan sencillas y evidentes son sus fórmulas. Así, viven entre ustedes, y no acaban de entender porque ustedes no hablan como ellos." 

Había llegado la nave al muelle. Alrededor del Profeta se arremolinaba la multitud transida de dolor. El Profeta tornóse hacia ella como queriendo hablar, pero la emoción le ahogaba la voz. Hubo un largo minuto de conmovido silencio. Entonces se oyó la imprecación del timonel de la nave: "Decídase, mi hermano, dése un sabanaso y súbase ya, que ando con el schedul retrasao." 

El Profeta se volvió hacia la multitud, hizo un gesto de resignación y lentamente abordó la cubierta. 

Acto seguido, el timonel cubano puso proa al horizonte. 

Luis Aguilar León
Diciembre, 1986

Aclaración: una versión mutilada y aprócrifa de este trabajo ha sido diseminada ampliamente en Cuba, con la muletilla de que fue editada en la revista "Selecciones del Reader Digest", en 1947. Hemos visto con asombro cómo esta falsedad se ha diseminado poco a poco internacionalmente. 

Remitido por Joe Noda