29 de abril de 2018

TRES CENTENARIOS EN COVADONGA



HISTORIA, ESPIRITUALIDAD Y  NATURALEZA:   
CENTENARIOS COVADONGA 2018.

Asturias celebra en 2018 una triple efeméride única, centrada en Covadonga y su entorno. Se da la histórica coincidencia de tres centenarios simultáneos: el de la Coronación de la Virgen de Covadonga, el de la creación del Parque Nacional de la Montaña de Covadonga y el decimotercer centenario de los orígenes del reino de Asturias. Tres Covadongas en una: la histórica, la espiritual y la natural, en una conjunción extraordinaria que convierten a Asturias en un destino universal.

Covadonga histórica


Covadonga tiene nombre propio en la Historia de la Humanidad. Los acontecimientos acaecidos en este lugar en el siglo VIII le confieren un valor cultural universal: el origen del primer reino cristiano peninsular, su impronta y esencia han pervivido a lo largo de los siglos hasta la actualidad, convirtiendo a Covadonga en un sitio de referencia para visitantes, viajeros y peregrinos de medio mundo.

Según la tradición, la Virgen ayudó a los cristianos capitaneados por Don Pelayo,   provocando un desprendimiento de rocas en la conocida como batalla de Covadonga, que diezmó el ejército árabe. Esta victoria es legendariamente considerada como el inicio de la  Reconquista  y la reinstauración de los reyes cristianos en la Península.

En el año 722 una pequeña parte de Asturias era lo único que quedaba en el mapa de la tierra que un día habían dominado los visigodos. No obstante, en ella habitaba un pequeño reducto de soldados que, tras derrotar y poner en huida al ejército musulmán, inició hacia el sur la Reconquista cristiana, aventura que acabaría ocho siglos después cuando los musulmanes fueran expulsados de Granada.

Covadonga fue el pistoletazo de salida del proceso que llevaría al nacimiento, en un futuro, de los diferentes reinos ibéricos a costa de la expulsión de los musulmanes.

A pesar de la rápida conquista de los territorios de la península por los musulmanes, los cristianos les guardaban una desagradable sorpresa pues, en el norte, se empezó a gestar una resistencia en contra de la invasión.
Aunque estos pequeños grupos de cristianos todavía no podían plantar cara a los invasores, se decidieron a defender a ultranza sus territorios, de manera que los musulmanes no tuvieron más remedio que abandonar la idea de conquistarles.  Al fin, la primera resistencia se empezaba a gestar en todo el territorio montañoso, aunque sobre todo en el núcleo astur. De hecho, no pasó mucho tiempo hasta que este pequeño grupo del norte vio subir al poder a un líder que les llevaría a la victoria: Don Pelayo.
No obstante, los musulmanes reaccionaron como cabía esperar: formaron un poderoso ejército y se dirigieron con decisión hasta el núcleo astur decididos a acabar de una vez con la rebelión. Por su parte, los cristianos, de manos de Don Pelayo, decidieron plantar cara al ejército musulmán. El enclave para resistir los ejércitos arábigos fue Covadonga, un paraje situado cerca de Cangas de Onís (al este de Asturias).
Concretamente, Don Pelayo protegió este territorio con los escasos soldados que pudo reunir. Ante el acoso musulmán, Pelayo y sus hombres, unos 300, se refugiaron en Covadonga, una cueva del monte Auseba que está al fondo de un estrecho valle en los Picos de Europa.  
En este punto la historia se diluye y varía dependiendo de si el cronista es cristiano o musulmán. Esto se debe a que los primeros trataron el suceso como una batalla de dimensiones épicas mientras que los segundos pasan por alto este suceso y lo consideran de escasa importancia.
Según cronistas cristianos de la época una fuerza divina se unió a Don Pelayo,   dándole la victoria frente a los 188.000 soldados del ejército musulmán. “Al punto se mostraron las magnificencias del Señor: las piedras que salían de los fundíbulos (catapultas) y llegaban a la casa de la Virgen Santa María, que estaba dentro de la cueva, se volvían contra los que las disparaban y mataban a los musulmanes… Por el contrario, las escrituras musulmanas guardan una visión mucho menos heroica.
 ¿Qué sucedió en realidad?  Hay una versión más realista y posible dentro del texto: los musulmanes se vieron obligados a penetrar por un angosto valle para plantar cara a los astures.  La estrechez del terreno no les permitía desplegarse por lo que tenían  que avanzar en fila. A los seguidores de Pelayo, situados en las laderas, les fue relativamente fácil hacerlos retroceder por un procedimiento tan simple como el de arrancar peñas y lanzarlas ladera abajo.  
Fuera como fuese, lo cierto es que la victoria en la Batalla de  Covadonga (718)  supuso el inicio de la Reconquista cristiana, la cual duraría nada menos que ocho siglos. Y ya saben lo que reza el dicho: «Asturias es España y, lo demás, tierra conquistada».


Covadonga espiritual

La histórica gesta de Pelayo en Covadonga propicia una devoción mariana, hace de este sitio un referente espiritual universal y un icono cultural vinculado a la religiosidad popular. Incluso ecos legendarios atribuyen a Covadonga un culto telúrico y natural inmemorial. Covadonga es por tanto un icono inmaterial y un sentimiento de profundo arraigo que ha conservado intacta su esencia hasta hoy.

Conocida popularmente como La Santina, es una imagen de la Virgen María que se encuentra en una cueva  rocosa en las montañas de la Cordillera Cantábrica. La cueva es un importante centro de peregrinación mariana.

La imagen primitiva se perdió en un incendio. La actual talla data del siglo XVI. Es una talla policromada cubierta de vestiduras y manto, aunque fue concebida para mostrarse sin el ropaje y el manto está pintado sobre la madera en un color azul verdoso adornado con flores rojas. La capa es de color rojizo con los bordes dorados. La imagen sostiene una imagen del Niño Jesús en su mano izquierda y en la derecha sujeta una rosa de oro.   

El 8 de septiembre de 1918 fueron coronadas canónicamente las imágenes de la Virgen de Covadonga y del Niño Jesús que porta en brazos.

El entonces Obispo de Oviedo, Mons. Javier Baztán y Urniza, había solicitado del Papa Benedicto XV esta gracia, así como la concesión de un Jubileo extraordinario, extensivo a los meses comprendidos entre marzo y octubre de ese año, en el que se conmemoraban, además, los 1200 años  de la batalla de Covadonga. Por todo ello, el 8 de septiembre de 2017 se declaró abierto el año Jubilar Mariano de Covadonga, con el que conmemora aquella efeméride.

La Santa Sede ha concedido la gracia de la Indulgencia Plenaria a cuantos peregrinen a Covadonga y cumplan los requisitos establecidos por ella para alcanzar el perdón y el don de una vida nueva en Cristo. Este Año Jubilar será clausurado el 8 de septiembre de 2018.  El papa San Juan Pablo II visitó el santuario y ofició Misa en la cueva de Covadonga.

En 1939, poco antes de finalizar la guerra civil, la imagen de la Santina fue robada de su cueva y llevada a Paría,    aunque no fue objeto de profanación alguna. Terminada la Guerra, se hizo cargo de la Embajada española en París el doctor Pedro Abadal, quien trasladó la imagen en su coche cerrado desde la embajada de España en París, donde fue encontrada, hasta la frontera con España.

El 11 de junio de 1939 entraba triunfalmente en España la imagen de la Santina.   Dos días después llegaba a Asturias entrando por Pajares. 

Pasó entonces nueve días en la Catedral de Oviedo, hasta que por fin llegó a Covadonga. 




Covadonga natural

Covadonga tiene un entorno paisajístico único. La diversidad y belleza de esta naturaleza y el afán por preservarla son la razón de aquella declaración del Parque Nacional de la Montaña de Covadonga en 1918, por el Rey Alfonso XIII, que sería el embrión del actual Parque Nacional de los Picos de Europa. La figura creada en aquel momento combina el amor por la naturaleza, con un espíritu innovador y pionero.

El Parque Nacional Picos de Europa es una de las mejores reservas mundiales de los ecosistemas ligadas al bosque atlántico e incluye la mayor formación caliza de la Europa Atlántica. Es  el primer espacio protegido del país.  El 9 de julio de 2003 la Unesco aprobó la propuesta que lo convierte en Reserva de la Biosfera.

En la actualidad el Parque Nacional de los Picos de Europa constituye con 1.913.858 visitantes (2015), el tercer parque nacional mas visitado de España, después del Parque Nacional del Teide (Tenerife, Canarias) y el Parque Nacional de Guadarrama (Madrid-Castilla y León).