19 de abril de 2012

SIERVO, AMIGO Y PASTOR


 
Siervo, amigo y pastor

Por el Rev. Martín N. Añorga

Escribir este artículo es una difícil tarea. Se trata de hablar de uno de mis mejores amigos, un sacerdote a quien he querido entrañablemente y con quien he compartido bellas experiencias de la vida, mi hermano de luchas y esperanzas, Monseñor Agustín A. Román, sacerdote eminente de la Iglesia Católica, Obispo Auxiliar Emérito, pastor de pastores, servidor incansable de la comunidad cristiana y de la sociedad en general, líder respetado en muchos ámbitos del mundo por su defensa heroica de los derechos humanos y hombre de recia y profunda espiritualidad.

Yo recuerdo de manera muy particular al padre Román en su desempeño como capellán del Hospital Mercy durante los años 1967 al 1973. Fue a finales del año 1968 cuando me ingresaron por Emergencias en el Hospital Mercy. Unos dieciocho días, muchos de los cuales pasé en la Unidad de Cuidados Intensivos, estuve recluido en el recinto hospitalario. Muchas cosas he olvidado de esos días; pero algo que ha quedado permanentemente grabado en mi memoria era la visita diaria, casi al amanecer, del hoy mi gran amigo Monseñor Román.

Sus palabras de consuelo y de ánimo me fortalecieron en la dura travesía que me tocó andar. Cada día, después que el pastor de almas que era Monseñor Román me visitaba, se dirigía al vestíbulo donde velaban por mi salud mi esposa, mis hijos pequeños y algunos feligreses de la Iglesia que entonces pastoreaba. Los reunía y los llevaba a todos a la Capilla para organizar un servicio de oración. Andando los años he oído extraordinarios testimonios sobre el ministerio pastoral del entonces joven sacerdote, que cumplió sus 40 años de edad siendo capellán del Hospital. "Lo veía entrar a mi habitación y sentía que era un ángel que me enviaba el Señor", he escuchado decir a muchos.

La vida de Agustín A. Román ha sido extraordinaria. Fue ordenado como sacerdote en Cuba el 5 de julio de 1959, siendo asignado a la Diócesis de Matanzas, en cuya jurisdicción ejerció ministerio pastoral en las parroquias de Coliseo-Lagunillas y Pedro Betancourt, al tiempo en que se desempeñaba como Director Espiritual de la Juventud Católica. El nació en el pequeño y simpático pueblo de San Antonio de los Baños y sabía desempeñarse con noble habilidad en comunidades campesinas.

Poco tiempo pudo el soñador sacerdote desempeñar sus labores eclesiales en Cuba. El 17 de septiembre del año 1961 fue abruptamente expulsado de la Isla en el barco Covadonga, junto a otros 130 sacerdotes, entre los que se encontraba el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de La Habana, Eduardo Tomás Boza Masvidal. Sin documentos de identificación y sin ni siquiera un pasaporte, se convirtió en un personaje propio de una novela de Virgil Gheorghio. Durante los años 1962 al 1966 fue el Director Espiritual y Profesor del Instituto de Humanidades en Temuco, Chile, al tiempo en que prestaba servicios pastorales en una parroquia de la comunidad.

Tal como lo contaba Román, llegó a la Arquidiócesis del Gran Miami en el año 1966, siendo recibido en la vieja parroquia de San Juan Bosco por otro santo hombre de Dios, el Padre Emilio Vallina. Allí, ambos héroes de la fe recibieron a miles de cubanos que llegaban como refugiados de la Isla encadenada por el comunismo, sin recursos, sufriendo la agonía del desamparo. En San Juan Bosco hallaron el camino de la esperanza y lograron superar la inseguridad del destierro.

Posteriormente fue enviado a la Catedral Saint Mary, donde hizo labor pastoral entre los hispanos de la comunidad circundante a la Catedral, y finalmente fue asignado a concretar el proyecto de la construcción física y espiritual de la Ermita de la Caridad, obra a la que dedicara consecutivamente 40 años de su vida sacerdotal. La Ermita es hoy día un Santuario al que acuden personas de todos los puntos cardinales de Estados Unidos y de muchos países del mundo. Sin acudir a fortunas ajenas, dependiendo de la sencilla generosidad del pueblo, se llegó a levantar el símbolo religioso más visitado de todo el sur de la Florida.

Increíblemente, Monseñor Román, inmerso en la demandante obra de la Ermita, halló tiempo para ejercer un extraordinario ministerio cristiano de proyección cívica participando como conciliador en los conflictos relacionados con presos cubanos en las cárceles de Oakdale y Atlanta en los atareados días del éxodo del Mariel. Varios viajes, a veces intempestivos, tuvo que realizar el consagrado sacerdote a escenas en las que se produjeron altercados entre los presos y sus guardianes que derivaron en sucesos de violencia. Las autoridades norteamericanas depositaban toda su confianza en los esfuerzos de Monseñor Román, y a la vez los encarcelados por delitos supuestamente cometidos en Cuba y no en los Estados Unidos, reclamaban respeto para sus derechos y exigían una comparecencia judicial en la que se aclararan sus casos respectivos. Entre ambos polos el pastor sereno y audaz alcanzó objetivos que algún día la historia se encargará de reseñar.

Hablar de Agustín A. Román no es fácil hacerlo en apretadas líneas. No podemos ignorar, sin embargo, su extraordinario interés en las relaciones ecuménicas. El ha sido el promotor de la creación del Grupo de Trabajo de Guías Espirituales en el Exilio. Sus brazos están permanentemente abiertos para recibir a hermanos y amigos de otras vertientes. Para él, todos los que aman a Dios y se saben redimidos por la sangre de Cristo eran sus hermanos verdaderos.

Si se me preguntara cuál ha sido el don más significativo en la vida y el ministerio de Agustín Román, sin vacilaciones usaría una sola palabra: su humildad. El sencillo sacerdote era un hombre ilustrado, poseedor de varios títulos académicos, orador convincente, consejero y orientador de alta calidad y con muy abundantes frutos, organizador y trabajador incansable; pero sin salirse jamás de la preciada ruta que le marcara como ejemplo San Francisco de Asís.

Monseñor Román y el que escribe estas palabras somos prácticamente de la misma edad. Unos dieciséis meses he sido "más viejo" que él. A menudo le recordaba que siendo yo mayor, debía obedecerme, y le rogaba que atenuara su ritmo de vida, que no asumiera tantas responsabilidades como las que atendía y que se diera un tiempo para cuidarse a sí mismo. Su réplica era siempre la misma: "Dios me llamó para que le sirviera, y quiero morir sirviéndole". Su deseo fue complacido por el cielo: murió en su automóvil, "con las botas puestas", rumbo a una clase que impartía semanalmente a determinados miembros de su congregación.

Uno de los grandes honores que me ha dispensado Dios es el de permitirme una cercana y fraterna amistad con este extraordinario servidor suyo. Puedo definirlo como un líder de proporciones gigantescas, al tiempo en que lo he visto comportarse como un siervo humilde y dedicado. Sabía mezclar su investidura con los polvos de los caminos cotidianos y amó a Dios de tal manera que lo amaba en las manos empobrecidas de los necesitados, en las rodillas que alababan a Dios y en las abrumadoras demandas que se ve precisado a satisfacer.

Creo que en Miami -y en otros muchos lugares- le debemos mucho. Yo, por lo menos, tengo deudas impagables de gratitud para con este profeta de Dios que transformó con su trabajo y su mensaje a vidas incontables.

Recientemente, estando aún vivo, aunque aquejado de varias enfermedades, pudo ver su nombre identificando el tramo de la avenida que sirve de pórtico al santuario de la Ermita. Los que crean que poniéndole a una importante calle el nombre del Obispo Román lo han honrado, quizás estén en lo cierto. Pero de una cosa yo estoy seguro. La que de veras se ha honrado con esa designación ha sido la ciudad de Miami. No me parece que en el país tengamos a muchas ciudades que hayan disfrutado del ministerio de un sacerdote de la personalidad y estatura espiritual que fuera este hombre de Dios.

Monseñor Román recibió decenas, por no decir centenares, de placas y diplomas, proclamaciones de numerosas ciudades, cuadros y fotografías emblemáticas, y en fin, tantos honores que no habría pared lo suficientemente amplia para exhibirlos, pero en su modestísima oficina solamente estaba la imagen de su amada virgencita y una foto preciosa del mar sobre cuyas orillas se recuesta el edificio de la Ermita.

Agustín Aleido Román, sin despreciar las bondades que los demás le dispensaban, se asía solamente de este lema bíblico: "¡Ay de mí si no evangelizo!"

Precisamente esa fue su misión, y en realizarla gastó, hasta el último aliento de su valiosa vida.

Hoy lo recuerdo con una lágrima fraterna y le digo con orgullo que pronto volveremos a encontrarnos, y ya para nunca más separarnos, disfrutando de la gloria en los cielos de Dios.
Recibido de Rogelio Zelada

PALABRA DE CUBANO


PALABRA  DE  CUBANO

Por Amelia María Doval

Algunos cubanos, como yo, nacimos después de 1959 ya cuando Fidel Castro llevaba más de 8 años diciendo mentiras y robando sin tener escrúpulos, repartiendo lo que no le pertenece porque aquello que considera suyo, no se lo entrega a nadie, y ni hablar del poder que detrás de una falsa renuncia escondió la cobardía de presentarse a elecciones.

Para entonces muchos otros cubanos habían tenido la valentía de defender sus derechos ante los ineptos que se apoderaban de un país en desarrollo para, sumados a la incapacidad de su líder comenzar a destruirlo(no es palabra de gusanera es realidad histórica-económica), sin necesidad de un embargo convertido en bloqueo, justificación mundial de la ineficiencia de crear para el futuro. Esos hombres, los primeros verdaderos mártires, murieron  ante el paredón de fusilamiento o estuvieron en prisión por muchos años, tantos que la rabia se apoderó de ellos.

Pasado el tiempo, hubo quienes se sumaron a la protesta y decidieron enfrentarla dentro o fuera, y al lograr salir del país siempre tuvieron un lugar donde llegar, una tierra que los acogió proponiendo más que exigiendo un buen comportamiento social e incorporarse a la voluntad de mejorar, porque sin trabajar no se escapa de la rueda de la miseria. Los primeros cubanos que arribaron a otras tierras dejaron un camino abierto, cortaron el marabú que obstruía el desarrollo y propiciaron lo necesario para aquellos que como yo llegamos mucho después. No importa si esos a quienes se refieren con despotismo tienen sus rezagos, sus odios y sus recelos, justificados están y de errores estamos construidos los humanos. Esa “gusanera de Miami”, levanta la voz por el bienestar de cada cubano y aunque algunos pueden criticar con palabras y gestos jamás han negado el derecho de existir de los que vienen a acusarlos y además  a comer de ellos.

Sería bueno y positivo que muchos de esos que critican desde allá y algunos desde su disfraz aquí, también hagan un aparte para reconocer que muchas familias cubanas en la Isla ( no digo archipiélago porque los cayos son zona vedada para el cubano promedio), comen, visten y disfrutan gracias a los grandes sacrificios de los que “están afuera”, no del gobierno que sólo discursea y reprime.

Las medicinas que no son donación de los grandes fabricantes y están restringidas en Cuba, son llevadas, suministradas por los de aquí. Los negocios que allá se han movido después de la supuesta apertura económica han venido propiciados por el empujón de una “gusanera” que trabaja para sostener un país miserable, consumido en política barata y discursos caducos, además de abrirse a una crítica absurda que ataca sin respeto a quienes le deben lo que poseen y no miento: después de 1959 muy pocas construcciones que realmente valgan el derecho a mantenerse en pie se han logrado, la mayoría disfruta de lo que a otros le quitaron y ahora viven de su esfuerzo también.

La “gusanera” de Miami, tiene organizaciones que envían cada mes sillas de ruedas, pampers para enfermos, comidas, medicinas y otros productos a enfermos críticos en Cuba que no reciben ayudas de ese gobierno que se vanagloria de los éxitos médicos escondidos en ineficiencias justificadas. Esa “gusanera” permite que usted y yo tuviéramos las puertas abiertas una vez  aquí sin importarle si está o estuvo en contra o a favor, sin embargo trate de hacer lo mismo en la finca de los Castro y sabrá los resultados.

Esa “gusanera de Miami”, que fue expulsada de su país o escapó, sin permitirle reclamar los bienes ganados con su trabajo, hoy puede mostrar con orgullo todo lo alcanzado porque en el mismo periodo de tiempo, con menos recursos, fuera de su país, comenzando desde cero, en otro idioma, sin asistencia médica, traumatizados algunos por las pérdidas de familiares y otros por la separación de sus orígenes, hoy han levantado un imperio de grandeza que pueden mostrar al mundo, sin embargo los otros, los que critican, vociferan, acusan y se regodean orgullosos en la inercia y la vagancia, consentidos por la costumbre de vivir de migajas y sin otra ambición que consumir sin aportar, sólo han podido demostrar su incapacidad para construir, progresar, luchar y batallar.

A quienes critican, censuran y acusan, les sugiero producir, trabajar e intentar levantar un país con el sudor de su sacrifico para luego tener la vergüenza y el honor de  proponer una comparación, tienen lo necesario sólo necesitan coraje y voluntad.

Miami, tiene el sello de varias culturas, de diversas costumbres que sumadas y multiplicadas a la idiosincrasia del pueblo americano han permitido sobresalir a una comunidad de gente luchadora que tiene el derecho de criticar porque todo lo que posee es resultado de su esfuerzo. Si usted, el acusador de dedo largo puede llegar a este país y demostrar que tiene el poder de avanzar, nadie lo señalará, ni lo llevará a prisión, podrá estudiar con ayuda del gobierno, trabajar quizás en un negocio de cubanos que es próspero y permitirá que usted pague sus cuentas decentemente sin robar o engañar y por si fuera poco enviar a los suyos que están detrás. Deténgase un momento ante su avalancha de miseria humana y su envidia de pobre con egoísmo, súmese a los que creen en el respeto y el progreso, desde adentro, sin gritarlo sólo reconozca que en 50 años de vida activa usted puede lograr menos en su CUBA que en un año de existencia común en este Miami.

 Si usted no pierde tiempo, estudia, trabaja no importa si en uno o dos o tres empleos, llegará a su casa cansado, pero sentirá el agotamiento de saber que puede producir su sustento y no tiene que robarlo, negociarlo o esconderse. ¿Hay diferencia, verdad?, allá vive del cuento de creer que vive, aquí vive de su esfuerzo que no es un cuento, es la vida. La “gusanera de Miami” y la de Venezuela, gritan con los bolsillos llenos, usted vocifera esperando que se los llenen con la migaja del sumiso. ¡qué pena de ser humano, porque no tiene el valor de defender sus derechos y crítica a quien tuvo la valentía de hacerlo! Señor, compañero en su jerga, colóquese el ropaje de hombre, la educación de humano, el respeto de ciudadano y deje de vivir como un animal domesticado para pensar por su cerebro y producir con sus manos.
 AMELIA M DOVAL
"La vida no se vive por las veces que respiras, sino por los momentos que te dejan sin aliento"

FRASE DE SABIDURÍA

Los jefes son como las nubes, cuando desaparecen ¡el día se alegra!
- Anónimo

18 de abril de 2012

SEMANA SANTA AL PIE DEL GUADALQUIVIR

Semana Santa al pie del Guadalquivir
Vídeoclip Oficial "Aromas de Sevilla"
Pascual González y Cantores de Hispalis


http://www.youtube.com/watch?v=sTomLZ8RpfYhttp://www.youtube.com/watch?v=sTomLZ8RpfY

Remitido por Joe Noda

EL BAUTIZO DE MIAMI


¡Gracias, Jorge Ramos!


El bautizo de Miami

Jorge Ramos Ávalos
Reforma, México
15 Abr. 12
 

Llevo casi un cuarto de siglo viviendo en Miami y sé que cuando alguien llega a esta ciudad lo más probable es que sea sometido a un simple pero feroz interrogatorio: ¿estás a favor de la dictadura castrista o en su contra? La respuesta, inmediatamente, te clasificará como un amigo o un enemigo del exilio cubano. Este ritual es lo que yo llamo el bautizo de Miami.

Nadie importante se escapa. Políticos, diplomáticos, deportistas y artistas pasan por este "bautizo". Una vez que pisan tierra miamense, un periodista o un exiliado se encargará de hacerles la pregunta. Y está prohibido responder "no sé" o "déjame pensarlo un poquito más".

Es una cuestión de sobrevivencia. Se trata de definir quién está contigo y quién en contra. En esta comunidad hay mucho dolor y resentimiento; cientos de miles huyeron de la dictadura comunista y lo perdieron todo. Esa pregunta busca, al mismo tiempo, concientizar sobre el brutal régimen y crear alianzas para su inevitable y futura desaparición.

No hay castrismo sin Fidel y Raúl Castro, y los dos líderes están a punto de pasar la hoja. Basta ver su edad. Son una desgraciada excepción frente a los movimientos mundiales contra caudillos y tiranos. Su sangrienta dictadura de 53 años se ha caracterizado por la represión, la falta de libertad y la absoluta ausencia de democracia multipartidista. Dos tipos han decidido por décadas el destino de millones y eso no se vale.

Ozzie Guillén, el mánager venezolano del equipo de beisbol de los Marlins debió saber sobre este bautizo de Miami antes de decirle a la revista Time que amaba y admiraba a Fidel Castro. Es imposible decir una estupidez así sin ofender a la ciudad que te da de comer y que pagó millones de dólares de impuestos para construir un estadio que no se necesitaba.

Los cubanos de Miami son implacables con este tema y tienen toda la razón. Hay que criticar y denunciar las dictaduras en todo momento, sin tregua. Elie Wiesel, el premio Nobel de la Paz y sobreviviente del holocausto, lo dijo mejor que nadie: "Hay que tomar partido. La neutralidad ayuda al opresor, nunca a la víctima. La acción es el único remedio contra la indiferencia".

No se puede ni se debe ser neutral ante Fidel y Raúl Castro. Son vergonzosas las imágenes del Papa Benedicto XVI de la mano, literalmente, con Fidel. El Papa prefirió al opresor que a las víctimas y -al igual que el presidente de México, Felipe Calderón, durante su reciente visita a la Habana- se rehusó a reunirse por un minuto con las Damas de Blanco y otros disidentes. El Papa y Calderón tomaron partido con los que matan y reprimen, no con los que buscan un cambio democrático.

Estas son las cosas que molestan tanto en Miami. El exilio cubano, correcta y tristemente, sabe que lo han dejado solo en su lucha contra la dictadura castrista. Cada visita en la Habana, cada foto con un sonriente Fidel, cada vez que un presidente o político se rehúsa a llamar tirano a quien gobierna a dedo y a fusil, los cubanos de Miami reafirman su convicción de que el mundo le ha dado la espalda a su tragedia.

Miami ha crecido mucho pero aún tiene ese aire de que todo es transitorio. Estamos, parecen decir los cubanos, pero solo hasta que Cuba sea libre. La sensación de temporalidad de la ciudad se reforzó con la llegada de los nicaragüenses huyendo de los sandinistas, y de los colombianos de la violencia, y de los venezolanos de Hugo Chávez. Cada crisis latinoamericana significa más renta de apartamentos en Brickell y Miami Beach y de casas en Hialeah y Kendall.

Miami es un refugio; un lugar donde se espera el cambio, donde se curan las heridas y donde se prepara el regreso. Pero en el caso de los cubanos, ese posible regreso se ha postergado por más de medio siglo y aún no hay fecha.

Se derrumbó el muro de Berlín y el bloque socialista, y en Cuba no pasó nada. La primavera árabe se enfrió en la isla. Y esa frustración de que cualquier intento de apertura, hasta la internet, se estrella con el malecón de la Habana, se siente en carne viva en Miami.

Por eso, lo que le queda a esta comunidad es mantener con dignidad y firmeza su oposición al régimen de la Habana. Y eso implica criticar y denunciar a cualquiera que intente ocultar la desgracia que se vive en Cuba.

Ozzie Guillén pidió "perdón con el corazón en la mano, de rodillas" tras declarar su amor por Fidel. El puede decir lo que quiera. La primera enmienda de la constitución lo protege. Pero el problema es que tocó donde más duele. Las palabras importan. Los Marlins, protegiendo su inversión, lo suspendieron por cinco juegos; los cubanos, en el fondo, ya lo poncharon de por vida.

Mis dos hijos llevan sangre cubana y estoy muy orgulloso de eso. No puedo dejar de pensar que si hubieran nacido en Cuba hoy serían esclavos de un sistema, su vida dependería de dos ancianos y no podrían decir, ni siquiera, "abajo el comunismo" (como el hombre que fue arrestado tras gritarlo en la misa del Papa en Santiago). Ellos y yo sabemos la enorme bendición que fue el que nacieran en Miami.

El bautizo de Miami es un ritual al que me he acostumbrado y que entiendo a la perfección. Pone en un lado a los que están por la libertad y del otro a los que no tienen el valor de llamarle dictador al dictador.
 
Twitter: @jorgeramosnews
Remitido por María Dominicis

MORALEJA PARA CUALQUIER DÍA


Cuentan que una pareja de recién casados se mudó de casa. La primera mañana, mientras tomaban café, la mujer reparó a través de la ventana, que una vecina colgaba sábanas en el tendedero.

-¡Qué sábanas tan sucias cuelga la vecina en el tendedero...! - Le comentó a su marido. Quizás necesita un jabón nuevo... ¡Ojala pudiera ayudarla a lavar las sábanas!

 El marido la miró sin decir palabra alguna.

Cada dos o tres días, la mujer repetía su discurso, viendo a través de la ventana, como la vecina tendía su colada.

Al mes, la mujer se sorprendió al ver a la vecina tendiendo las sábanas blancas, como nuevas, y dijo al marido: ¡Mira, por fin ha aprendido a lavar la ropa! ¿Le enseñaría otra vecina?

El marido le respondió:
 
-¡No, hoy me levanté más temprano y lavé los vidrios de nuestra ventana!

VÍDEO ENTREVISTA A YOANI SÁNCHEZ

Interesante entrevista a Yoani Sánchez, creadora del blog "Generación Y" que produce desde La Habana, denunciando el el atropello sistemático a los derechos humanos, el fracaso administrativo del gobierno y el cada vez más patente desencanto del pueblo cubano:


http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=_pIITyzrvF4

Remitido por Renato Recio

FRASE DE SABIDURÍA

Sonríe siempre, para no dar a los que te odian el placer de verte triste.

Ignacio Peires, (1950- ) Sacerdote de Sri Lank (antiguo Ceilán), radicado en Argentina.

17 de abril de 2012

BRIGADA 2506, BAHÍA DE COCHINOS



Brigada de Asalto 2506:
 Bahía de Cochinos


Col.(Ret.) Orlando Rodríguez Alvarez

Este simple resumen de hechos, está dedicado a las nuevas generaciones de cubanos que llegan al exilio y que aprendieron historia de Cuba en los libros de cuentos de Fidel Castro.

Los miembros de la Brigada 2506 fueron reclutados (Miami etc.), entrenados, armados (Guatemala/Retahuledo/Helvetia etc.), transportados (Nicaragua/Puerto Cabezas) y escoltados hasta su destino final Playa Girón-Cuba por agencias y medios controlados por el gobierno de los EEUU.

La Brigada 2506 en realidad era un batallón reforzado de unos 1500 hombres. En proporción, más de la tercera parte, unos 600 hombres, eran elementos de apoyo asignados en las áreas de logística, sanidad, transportación, comunicaciones, administración etc.

La misión primaria consistía, en conducir operaciones anfibias y de paracaidistas y establecer y defender una cabeza de playa en Bahía de Cochinos /Playa Girón y sostenerla por 72 horas hasta que el Consejo Civil arribara, se constituyeran y pidieran ayuda a los EEUU y otros países Latinoamericanos y desde la base establecida continuar las operaciones.

De la tropa de combate de unos 900 hombres, alrededor de 300 fueron neutralizados al ser hundidos los barcos en los que eran transportados, el resto unos 600 hombres fueron distribuidos en diferentes frentes en playa de Girón y sus alrededores.

La fuerza de unos 168 hombres que se suponía que desembarcara por la provincia de Oriente, indispensable para desviar tropas y la atención sobre las operaciones de Girón, abortó la misión por estar comprometida el área de desembarco y se regresó sin poder participar en las operaciones militares.


Un ataque simulado “finta” con equipos de sonidos, simulando una batalla por el área de Pinar del Río también para desviar la atención, no dio los resultados esperados.


Durante el desembarco en Girón dos de los viejos y depauperados barcos comerciales que transportaban personal, abastecimientos, armas, municiones, comunicaciones, hospitales, transporte, gasolina alimentos etc. fueron hundidos por “héroes” de la Fuerza Aérea revolucionaria cubana, porque eran blancos fáciles, estacionarios, desarmados e indefensos.

Una gran mayoría de los miembros de la B-2506, desembarcaron nadando hasta la playa, porque sus barcos fueron hundidos, los motores fuera de borda de los botecitos de desembarco no funcionaban, los arrecifes o el coral no les permitía llegar hasta la orilla. Como consecuencia muchos se vieron forzados a abandonar sus armas, municiones y la mochila con los pertrechos para no hundirse por el peso del equipo y ahogarse o para no ser ametrallados en el mar por los “héroes” de la Fuerza Aérea revolucionaria cubana.

En el medio de la operación todo el apoyo prometido por las agencias del Gobierno de los EEUU fue suspendido por el presidente J. F. Kennedy. sin que la jefatura ni los miembros de la brigada fueran notificados. Mas de la mitad de las misiones de apoyo de la Fuerza Aérea (B-26) de la B-2506 fueron cancelados en el medio de la operación antes de terminar de neutralizar los blancos asignados (aviones, tanques, camiones, depósitos de municiones, gasolina, puentes, carreteras etc.) necesarios para proteger y aislar el área de operaciones. Los líderes del Consejo Civil de la B-2506 fueron retenidos y aislados por nuestros amigos.

Los pocos aviones (B-26) de la B-2506 que pudieron despegar desobedeciendo las órdenes del poder de decisión americano, lo hicieron a sabiendas de que iban a una muerte segura porque no tenían cobertura de protección ninguna. Entregaron sus vidas por defender y proteger a sus hermanos de lucha de las oleadas de miles y miles de milicianos, soldados y policías que se lanzaban sobre los miembros de la B-2506 abandonados a su suerte por sus amigos, en las arenas de Girón. Estos sí fueron verdaderos héroes, derribados en el aire por falsos “héroes” de la robolución en sus aviones de combate, porque los aviones B-26 de la B-2506, eran blancos fáciles, lentos, pesados por la sobrecarga de combustible y completamente desarmados e indefensos. Situación muy parecida, en diferentes circunstancias al criminal asesinato de los Hermanos al Rescate que volaban avionetas Cesnas desarmadas en misiones de búsqueda y rescate para salvar las vidas de las familias que escapaban de Cuba en busca de libertad, y fueron derribados en aguas internacionales por otros “héroes” de barro de la revolución cubana, en sus aviones Jet (MIG-21) de combate por ordenes personales de Fidel Castro.

Los miembros de los equipos de infiltración que ya se encontraban en Cuba con las misiones de brindar apoyo durante el desembarco, obstaculizar las vías de acceso a las áreas de operaciones, establecer comunicaciones con elementos de apoyo de la resistencia interna, ayudar en la movilización de la población civil etc. nunca fueron avisados del desembarco por los poderes de decisión y coordinación americanos y fueron abandonados a su suerte como lo fueron los miembros de la B-2506 en las arenas de Girón.

Fidel Castro, para evitar la sublevación interna y el apoyo popular a la Brigada, movilizando todos sus recursos nacionales, ordenó la detención masiva de cientos de miles de hombres y mujeres a lo largo de toda la isla, los que fueron concentrados en campos deportivos, bases militares, parques, teatros etc. en condiciones de higiene deplorables. Durante esta operación fueron asesinados cientos de miembros de la resistencia, colaboradores y familiares de los hombres de la B-2506 y de los equipos de infiltración.

Conclusión:
Unos 400 hombres distribuidos en pequeños grupos en diferentes frentes sostuvieron la mayor parte de la lucha y con la ayuda de los pocos B-26 de la B-2506 que pudieron llegar a Girón sin ser derribados, repelieron durante tres días a mas de 100,000 soldados y milicianos combatiendo mañana, tarde y noche, sin agua ni comida y la mayoría de las veces, peleando con las armas y las municiones capturadas, entregadas o abandonadas por los militares y milicianos en el campo de batalla.

Miles de milicianos y soldados del régimen de Castro, murieron en la lucha, cientos fueron capturados y al final dejados en libertad.


Cuando Fidel Castro se dio cuenta que los miembros de la B-2506 seguían luchando con las armas y las municiones de su propia tropa, ordenó la retirada del frente de combate de las mismas y ordenó a todas las piezas de su artillería rusa (122mm) que concentraran todo su fuego en playa de Girón. Seguidamente cuando le informaron de que cada pie cuadrado de la playa había sido cubierto con miles de granadas de la artillería y que posiblemente no habría resistencia porque la mayoría estarían muertos, envió todos sus tanques rusos (T-34), seguidos por la infantería, los que para su sorpresa, algunos fueron destruidos a medida que avanzaban, hasta que se lanzó el último cohete y se disparó la última bala. Entonces llegó la orden de retirada, que se dejaran en libertad a los prisioneros y que se tratara de llegar a las alturas de Trinidad o el Escambray para allí reagruparse, esperar reabastecimiento de nuestros aliados y continuar la lucha. Esto nunca sucedió.

Sin agua, sin descanso, sin comida y agotados física y mentalmente después de tantos días de lucha, muy pocos pudieron penetrar los diferentes anillos de seguridad tendidos alrededor de Girón y de La Ciénaga de Zapata por más de 150,000 soldados y milicianos. Muchos de los heridos que no pudieron retirarse, fueron ejecutados en la playa por órdenes de Ramiro Valdez y otros fueron hacinados y asfixiados en la “rastra de la muerte” por Osmani Cienfuegos por órdenes de Raúl Castro.

A medida que los miembros de la B-2506 iban siendo capturados, los milicianos se sorprendían de que eran cubanos, porque sus jefes les habían dicho que eran soldados americanos que venían a invadir a Cuba. Después de establecida la identidad de cubanos, por lo general, los milicianos protegieron la vida de los brigadistas capturados, no permitieron maltratos y velaron por su bienestar físico. En realidad era la demostración sana de cordialidad del típico guajiro cubano.

Aun cuando estaban presos, bajo las peores circunstancias de maltrato físico y mental y las constantes amenazas de fusilamiento, ninguno de los hombres de la Brigada traicionó a los que los habían abandonado y siempre se mantuvieron y se mantienen firmes en los principios de libertad, democracia y unidad por los que desembarcaron en Cuba, con el propósito de restablecer un estado de derecho, ley, justicia y respeto a los derechos humanos del pueblo cubano.

A pesar de haber sido abandonados por sus amigos, haber perdido mas del 85% de todos sus abastecimientos y de no haber recibido el apoyo prometido, los hombres de La Gloriosa Brigada 2506 cumplieron con su misión y sostuvieron la cabeza de playa por las 72 horas establecidas y se han mantenido fieles hasta el día de hoy a sus principios de Libertad, Democracia y Unidad.

Nunca en la historia de La América, tan pocos se han enfrentado a tantos en condiciones tan desiguales por tanto tiempo y sobrevivieron para seguir luchando y contar la verdad al mundo.

Los miembros que quedamos de la Brigada de Asalto 2506 jamás abandonaremos a nuestra madre patria y no descansaremos en paz hasta que en una Cuba libre en un estado de derecho, llevemos ante los tribunales de justicia, donde quiera que se escondan a todos los que violaron los derechos humanos de nuestro pueblo e implantaron y dirigieron el sistema déspota y totalitario que ha asesinado y encarcelado a miles de nuestros familiares y compatriotas, destruido y hundido en la mas horrible miseria nuestra patria, dividido nuestras familias, convertido a Cuba en un gran cuartel militar, a la isla en una inmensa cárcel, y a nuestro pueblo en esclavos, mendigos y vagabundos. Mas de dos millones de cubanos de una población de once millones se encuentran exiliados y errantes por todo el mundo, miles han muerto en el mar tratando de llegar a tierras de libertad y el resto de los hombres y mujeres de las nuevas generaciones se encuentran buscando la primera oportunidad para escapar de ese infierno.

Por encima de todos y de todo Cuba será libre por la propia voluntad de los cubanos.

Por una Cuba libre, independiente, soberana, democrática y unida en el mejor interés de la familia, el pueblo y la nación cubana.
 

COL (Ret.). Orlando Rodríguez Álvarez

Reproducido de los archivos de La Gaceta de Puerto Príncipe.