Marlene María Pérez Mateo
Hacia 1929 una de las agrupaciones musicales cubanas más influyentes, el
Trío Matamoros, cumplía cinco años de fundado. Era para entonces una entidad
joven, haciendo sus pininos que llegarían a ser columnas vitales en el hacer
cultural de la nación. Ciro Rodríguez, Rafael Cueto y Miguel Matamoros, sus
integrantes, viajaron la isla y el mundo, siendo su líder Miguel Maramoros, un
reconocido compositor de piezas de gran calidad. Es el bolero-son la música
divina que marcaría la mayor trascendencia del grupo. La fusión suave,
melódica, cadenciosa y rítmica de los dos géneros: el bolero y el son, tan
subyugante en su lírica como en el acompañamiento.
Pero, ¿Qué pasaba también por
aquellos años? Entre 1926 a 1936 se había convocado una especie de esfuerzo nacional
en pro de la construcción de un santuario para La Virgen de La Caridad del
Cobre. Toda buena contribución era bienvenida.
Ello no era poca cosa y Don Miguel Matamoros, con su fácil y bello
sentido inspirador se sumó a la alegría del pueblo cubano en su loable empeño.
Miguel Matamoros |
Años después el título se
modificó por el de :”La veneración”. Sólo los cuatro versos del estribillo se
repiten una y otra vez; sobre todo al final de canciones como “Olvido” del
mismo género y autor. Lo cierto es que la letra es más extensa.
Pues bien mis lectores, si van al
Cobre ya saben qué quiero que me traigan.
Marlene María Pérez Mateo
Septiembre 9, 2011
Reseña # 2 de “A los 400 años”
El Trío Matamoros cantando a la Virgen de la Caridad del Cobre en este vídeo de Youtube:
El Trío Matamoros cantando a la Virgen de la Caridad del Cobre en este vídeo de Youtube:
Me parece buen trabajo el de esta entrada muy aclaratoria por cierto en la historia de la canción Veneración, que en muchos lugares por Internet sale como autor Rafael Cueto y Noemi Matos. Y también por el rescate de la tradición cubana en la devoción a la Virgen de la Caridad del Cobre.
ResponderEliminarVivo en Cuba, y quiero nuestra Obra con sus virtudes y defectos, con el deseo de mejorar todo lo que debe ser mejorado. Podemos tener muchas diferencias en los criterios, y coincidencias también, pero sobre todo te brindo La Rosa Blanca de José Martí.
No hay que llevarte una virgencita de la Caridad, porque no te es necesaria la llevas dentro.
A la persona que me remitio este comentario:
ResponderEliminarGracias.Reciba usted tambien de mi parte, La Rosa Blanca. Le saluda afectuosamente, Marlene M., la autora