Emilio
Ballagas
y
la Señora del Mar
Marlene María Pérez Mateo
Un buen camagüeyano de esos que no se olvidan
escribió en 1943 el poema “Nuestra Señora del Mar”. La homenajeada con tal
composición es la Virgen del Cobre y su autor Emilio Ballagas Cubeñas (1908-1954).
En su corta existencia Ballagas se perfiló
como la mas importante figura dentro del Neo-romanticismo en Cuba y la
vanguardia del 1930. Graduado del Instituto principeño en 1926 y de Pedagogía
en la Universidad capitalina dos años después y posteriormente en Filosofía y
Letras (1946). Figuró como ensayista y
profesor en la Universidad de Columbia y la Casa Hispánica en New York, y el Instituto Hispanoamericano de Cultura de
París.
Sus Premios Nacional de Poesía
(1951) y del Centenario (1953) como
ejemplo ilustran la dimensión de Ballagas. Sin embargo su mas significativa aportación
a las letras no está en tan valederos logros.
Don Emilio fue un cultor de la “poesía
negra”, para muchos el primero como tal. Aunque no pertenecía al grupo étnico
ni social identificado con este tipo de literatura, lo encarnó como ninguno. A
él debemos variadas composiciones no limitadas a una caracterización
estereotipada. No degrado la calidad estilística de sus trabajos, solo lo
perfilo a un nuevo entorno.
“La reina del mar” fue su poesía dedicada a la
Caridad del Cobre por parte de este autor. Finalizo esta reseña con sus versos.
Titulo:
Emilio Ballagas y la Señora del mar
Secuencia:
A los 400 años
Agosto 8
2012
SONETO DE LOS NOMBRES
DE MARÍA
En el pecho del Padre halló
su nido
La que en el seno al Hijo dio posada
Y allí de querubines alabada
La que, luna de Dios, subió sin ruido.
La que en el seno al Hijo dio posada
Y allí de querubines alabada
La que, luna de Dios, subió sin ruido.
En pañales como recién
nacido,
Entre vistosas alas fue llevada
Y por distintos nombres advocada
De su trono de luz no se ha movido.
Entre vistosas alas fue llevada
Y por distintos nombres advocada
De su trono de luz no se ha movido.
Pero el amor que multiplica
todo,
Panes y peces, el maná y la Forma,
Hace que la sin mancha baje al lodo,
Panes y peces, el maná y la Forma,
Hace que la sin mancha baje al lodo,
Que la luz soberana tome
forma,
Que la Belleza, al fin, halle acomodo
Y al ojo pecador dicte su norma
Que la Belleza, al fin, halle acomodo
Y al ojo pecador dicte su norma
Este soneto de Emilio Ballagas pertenece a su extenso poema "Nuestra Señora del Mar". La Gaceta de Puerto Príncipe también ha publicado otra composición poética de Ballagas que forma parte de este cuaderno Nuestra Señora del Mar: "Liras de la Imagen".
Este es el enlace:
http://lagacetadepuertoprincipe.blogspot.com/2012/03/liras-de-la-imagen-poema-de-emilio.htm
Este es el enlace:
http://lagacetadepuertoprincipe.blogspot.com/2012/03/liras-de-la-imagen-poema-de-emilio.htm
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