Había una vez cuatro individuos que se
llamaban
Todo el mundo - Alguien - Cada uno - y Nadie....
Todo el mundo - Alguien - Cada uno - y Nadie....
Había un importante trabajo que
hacer,
y se pidió a Todo el mundo hacerlo.
y se pidió a Todo el mundo hacerlo.
Todo el mundo estaba
seguro que Alguien lo iba hacer.
Cada uno podía haberlo hecho, pero en realidad no lo hizo.
Cada uno podía haberlo hecho, pero en realidad no lo hizo.
Alguien se enojó porque el
trabajo era de Todo el mundo.
Todo el mundo pensó que Cada uno podía hacerlo
y Nadie no dudaba que Alguien lo haría.
Todo el mundo pensó que Cada uno podía hacerlo
y Nadie no dudaba que Alguien lo haría.
Al fin de cuentas, Todo el mundo hizo
reproches a Cada uno
porque Nadie había hecho lo que Alguien podía hacer.
MORALEJA
Si se quiere hacer reproches a Todo el mundo,
sería muy bueno que Cada uno
haga lo que se debe hacer, sin tener la esperanza
que Alguien lo hará en su lugar,
porque la experiencia muestra que
cuando se espera a Alguien,
¡generalmente no se encuentra a Nadie!
CONCLUSIÓN
Se transfiere ese mensaje a Todo el mundo con el fin que Cada uno pueda enviarlo a Alguien sin olvidar a Nadie...
porque Nadie había hecho lo que Alguien podía hacer.
MORALEJA
Si se quiere hacer reproches a Todo el mundo,
sería muy bueno que Cada uno
haga lo que se debe hacer, sin tener la esperanza
que Alguien lo hará en su lugar,
porque la experiencia muestra que
cuando se espera a Alguien,
¡generalmente no se encuentra a Nadie!
CONCLUSIÓN
Se transfiere ese mensaje a Todo el mundo con el fin que Cada uno pueda enviarlo a Alguien sin olvidar a Nadie...
Circula libremente por Internet sin nombre
de autor.
Remitido por Joe Noda.
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