24 de octubre de 2015

Fallece el poeta Jorge Valls

 
Fallece el poeta Jorge Valls,
ícono del presidio político cubano

El poeta cubano Jorge Valls, ex prisionero político e ícono del presidio político y de la lucha por la democracia en Cuba, falleció el jueves en Miami.

Valls enfrentó a la dictadura de Fulgencio Batista y fue preso político del régimen de los Castro por más de 20 años, que lo condenó por "por actividades contra los poderes del Estado y por dirigir organizaciones antigubernamentales". En la cárcel comenzó su obra poética, que refleja mayormente el dolor del hombre sin libertad.

Desde el inicio de su prisión se declaró "preso plantado", la herramienta que los condenados por el castrismo usaron contra los abusos y la imposición de medidas carcelarias. Los plantados se negaron a trabajar, ponerse de pie para el recuento y en muchos casos a vestir el uniforme o responder a la numeración con que pretendieron borrarles la identidad y hacerlos entrar en un supuesto plan de reeducación.

Sus años de encarcelamiento, de 1964 a 1984, quedaron reflejados en el libro Veinte años y cuarenta días. Mi vida en una prisión cubana. Esta y otras obras sobre el tema del presidio le valieron cinco premios internacionales, incluido el Gran Prix en el Festival Internacional de Poesía de Rotterdam, celebrado en 1983.

Miami, la casa y los amigos

Al lado de Valls, Ángel Cuadra es uno de los poetas cubanos que lograron sobrevivir las cárceles castristas y cuyas obras son más reconocidas en el mundo hispanoamericano.

Cuadra, autor de varios libros de poesía y presidente del Pen Club de Escritores cubanos en el exilio, elogió la singularidad de Valls: "Es un cubano admirable, con talento literario, buen poeta, dramaturgo, un orador magnífico". Y concluyó: "fue profesor magnífico, pero también fue profesor en la vida corriente con los demás".

El periodista Pedro Corzo, su compañero de presidio, explicó a Martí Noticias que Valls "fue un hombre de unas convicciones pacifistas, de una gran honradez intelectual y un ejemplo en el presidio político cubano en lo concerniente a la defensa de los principios y valores trascendentes de la condición humana. Era un profundo admirador de José Martí".

"Cuba y los luchadores por un sistema de derecho han perdido una de las personas más esforzadas y más preclaras que he conocido en mi vida", dijo en medio de sus labores diarias en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) Amado Rodríguez, que permaneció 22 años de prisión y compartió el infortunio carcelario con Valls.

Ernesto Díaz es un preso plantado que cumplió 22 años de encierro, de 40 a que lo habían condenado. Díaz compartió con Martí Noticias sus vivencias junto a Valls: "Jorge escribió el prólogo de mi libro de poemas infantiles El carrusel y estábamos muy identificados. Yo creo que nos deja un legado para la cultura del pueblo de Cuba, nos deja un legado de amor, de comprensión y eso tenemos que recordarlo todos los cubanos con gratitud".

El 25 de abril de 2013 el taller-Galería Iván Galindo recibió a Valls junto a cinco poetas más, en el concepto de una lectura poética titulada "Poesía desobediente", allí Jorge Valls habló de cómo los largos y difíciles años de prisión no le apagaron la necesidad de seguir escribiendo sus versos.
Reproducido de martinoticias.com

22 de octubre de 2015

Llegada masiva de cubanos a México


Llegada masiva de cubanos
afecta vida diaria en frontera sur de México

Unos 150 cubanos indocumentados se entregaron este miércoles de forma voluntaria en la estación migratoria Siglo XXI, de Tapachula, perteneciente al Instituto Nacional de Migración de México, para que les otorguen un salvoconducto que les permita llegar a Estados Unidos.

El diario Quadratín de Chiapas dijo que según las autoridades mexicanas, la semana pasada fueron documentados más de 800 cubanos, quienes cruzaron siete países para llegar a Chiapas.

A las cinco de la mañana de este miércoles, los cubanos arribaron en grupos de siete y ocho personas, para entregarse a migración, después de cruzar en forma irregular el río Suchiate, que sirve de división política entre México y Guatemala, informó Quadratín.

De acuerdo con la versión de algunos cubanos, refiere el reportaje de la agencia de noticias local, en el interior de la estación migratoria Siglo XXI ya hay hacinamiento y escasez de alimentos. Esta contingencia, que se presentó desde hace 10 días, ha obligado al (INM) a utilizar su antigua cárcel y albergues, como el de la humanista Olga Sánchez, para recibir a los indocumentados.

«En las próximas horas se espera una quinta avalancha de unos 400 cubanos, que se encuentran varados en la frontera de Guatemala con México, entre ellos se estima que arriben unos 40 menores de edad», dijo Quadratín.

Ola de migrantes afecta vida de residentes en la zona

La reciente ola de cubanos que ha llegado al sur de México para cruzar la frontera con Estados Unidos ha cambiado muchos aspectos de la vida diaria del país. Ello incluye la saturación del transporte aéreo y terrestre, informó la corresponsal de TV Martí en Tapachula, Jessica Guadarrama, quien pudo constatar cómo esta situación afecta tanto a los cubanos como a los mexicanos.

Mientras algunos cubanos continúan inmediatamente su viaje hacia el norte de México, otros deben esperar en albergues debido a trámites burocráticos que incluyen hasta pruebas de ADN para los menores.

Los servicios migratorios en la zona no dan abasto para enfrentar la avalancha de cubanos que arriba a la zona, en su camino hacia la meta final, cruzar la frontera norte del país para llegar a Estados Unidos.

Reproducido de MartiNoticias.com

20 de octubre de 2015

El único retrato de santa Teresa

El retrato de Santa Teresa

Por Javier de la Cruz.

Fray Juan de la Miseria, que alguna noción de pintura tenía, y por mandato del P. Jerónimo Gracián, pintó el rostro de la Madre Teresa en los últimos días, principio de junio de 1576, de la estancia de ésta en el convento de San José de Sevilla. La madre Teresa, cuando le conoció junto con Ambrosio Mariano en casa de doña Luisa de la Cerda, le retrató al describírnoslo como «gran siervo de Dios y muy simple en las cosas del mundo».

En el cuadro de fray Juan, realizado al óleo sobre lienzo con unas dimensiones de 82 por 78 centíme­tros, más allá de que fray Juan de la Miseria no fuera un gran artista, y a pesar de las imperfecciones técnicas que evidentemente tiene la pintura, nos encontramos con un documento histórico de primer orden, el rostro de la madre Teresa que vienen a coincidir con las descripciones que de Santa Teresa, nos dejase María de San José, quien afirma «era en todo perfecta, como se ve por un retrato que del natural sacó fray Juan de la Miseria, un religioso nuestro santo».

El Padre Gracián nos cuenta la trama del cuadro: «Este retrato mandé yo hacer por mortifi­car a la Madre, porque ella me pedía con gran instancia que la mortificase; mas no me atreví á tanto que por aquella curiosa mortificación consintiese entrar seglar dentro del monasterio, sólo á fr. Juan de la Miseria que entraba á pintar allá dentro otras cosas…Un día le mandé que la retratase, y a ella que estuviese queda y se dejase retratar. Esto sintió ella mucho porque era muy humilde; y no sintió tanto la descomodidad y grosería con que fr. Juan la retrataba, que la hacía estar sin menearse la cabeza ni alzar los ojos mucho tiempo, cuanto que hubiese de quedar memoria y figura de ella en el mundo; y al cabo la retrató mal; porque, aunque era pintor, no era muy pri­mo y así solía decir la Madre Teresa con mucha gracia: «Dios te lo perdone, fr. Juan, que ya que me pintaste, me has pintado fea y legañosa».

Fray Juan de la Miseria, que no tenía una gran imaginación, y tal vez en este caso fuera lo mejor, copió directamente del natural, sin artificios, el rostro de la Madre Teresa. Las manos fueron pintadas después, y para que resaltasen las hizo en color oscuro sobre el hábito, y claro sobre la capa. También son añadidos posteriores las inscripciones situadas en el lado derecho de la imagen, donde va el nombre y se anota la edad de la Madre y la fecha de ejecución del rostro: “DIE SECVNDO ME / SIS IVNII”, así como el nombre del autor: “ESTE RETRATO FUE SA / CADO DE LA MADRE / TERESA DE JHESUS / FUNDADORA DE LAS DES / CALZAS CARMELITAS / PINCTOLO FRAI JUAN / DE LA MISERIA RELI / GlOSO DE LA DICHA ORDEN”.

Una vez beatificada la Madre Teresa, 1614, se añadió la paloma, símbolo del Espíri­tu Santo, y la filacteria que sale de su boca, con la leyenda: “MISERICORDIAS DOMINI IN ETERNVM CANTABO”.

Han sido numerosas las copias y las imitaciones del cuadro de fray Juan, hasta el punto de con­vertirse en norma para los pinto­res y grabadores que intentaron plasmar los rasgos físicos de San­ta Teresa.

El lienzo de fray Juan sirvió de base para el grabado que acompaña la primera edición de la las obras de San Teresa llevada a cabo por fray Luis de León en Salamanca en 1588, bajo el título de los libros de la madre Teresa, así lo reconoce la inscripción que va al pie del grabado: “Este retrato fue sacado de la Madre Teresa de Jhesus, fundadora de las descalzas carmelitas, pintolo frai Juan de la Miseria re­ligioso de la dicha Orden”.

19 de octubre de 2015

Balance del Año Teresiano

 
Balance del Año Teresiano
y el secreto de santa Teresa

Recorrido por el Año Jubilar Teresiano 2014-2015 y sus claves

Jesús de las Heras Muela

El jueves 15 de octubre, festividad litúrgica de la santa, en una hermosa y emotiva jornada, bella y suavemente otoñal, la ciudad de Ávila y con ella toda la Iglesia clausuraba el V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús, el Año Jubilar Teresiano 2014-2015. No cabía duda de que, puesta la mirada en el 15 de octubre de 2014, cuando arrancó el 500º aniversario, habían merecido la pena los esfuerzos, los afanes, las actividades, los reclamos y las convocatorias acerca de una mujer, de una cristiana excepcional que, cinco siglos después, sigue despertando por sí misma una extraordinaria capacidad de convocatoria, de atracción y hasta de fascinación.

¿Cuál fue y sigue siendo la razón del éxito de Teresa de Jesús Cepeda y Ahumada, de la mística y doctora, de la fémina, inquieta y andariega, de la reformadora y fiel hija de la Iglesia Teresa de Ávila (Teresa de Jesús o Jesús de Teresa)?

Veamos, primero, como ha ido el discurrir de este año teresiano para después esbozar una respuesta a la que pregunta que titula estas líneas: el “éxito” o el “secreto” de santa Teresa.

Vuelta al mundo y el Papa Francisco

“Camino de luz” fue el título de la peregrinación del bastón de santa Teresa de Jesús por treinta países del mundo –treinta países donde hay en la actualidad comunidades carmelitas-. La peregrinación tuvo dos fases: de octubre a febrero por los citados países, y de mayo a septiembre, por España.

La peregrinación llegó el miércoles 11 de marzo a Roma y, en la plaza vaticana, el bastón pudo ser venerado y besado por el Papa Francisco, quien exclamó la coloquial y entrañable frase: «¿Y con esto andaba la vieja?»…

El Papa Francisco no vino a España con ocasión del 500º aniversario, pero sí envío tres mensajes especiales: en la apertura del año, para la fiesta del 28 de marzo –día exacto del cumpleaños de la santa- y para el Encuentro Europeo de Jóvenes, desarrollado en Ávila del 5 al 9 de agosto. Por cierto que esta iniciativa, el EEJ 2015 Ávila, que atrajo a seis mil jóvenes, ha sido uno de los principales eventos del año.

Con otros dos gestos quiso el Santo Padre hacerse presente en las celebraciones: con su respaldo –incluso, con unas palabras y la entrega simbólica de una vela- a una cadena mundial de oración por la paz en las vísperas del 28 de marzo, fecha cuyo significado ya ha quedado referido; y con una iniciativa inédita en la historia de la numismática pontificia: las monedas de 2015 correspondientes al Papa no llevan su efigie, sino la de santa Teresa.

Una luminosa “explosión” cultural

Doctora de la Iglesia desde 1970, santa Teresa era doctora honoris causa por la Universidad de Salamanca desde 1925. Pues bien, ahora, desde el 1 de agosto de 2015, lo es por la Universidad Católica de Ávila y por otras cerca de dos decenas de universidades católicas de todo el mundo.

Escritora de capital importancia y reconocimiento unánimes, santa Teresa de Jesús ha sido en este año fuente de numerosas publicaciones, tanto históricas como teológicas como de libre creación. Sobre santa Teresa de Jesús han escrito libros, musicales, canciones y obras de teatro autores de relevancia tal como la de la recientemente fallecida Ana Diosdado, Espido Freire, Juan Manuel de Prada, Carmelo Erdozáin, Belen Yuste y Sonnia Rivas,  Francisco Palazón, Jesús Sánchez Adalid, Carlos Aganzo

La benéfica y fecunda “explosión” cultural teresiana durante este año se ha traducido también a cursos, seminarios, ciclo de conferencias, ejercicios espirituales, retiros, congresos… En este sentido, la Universidad de la Mística-CITeS de Ávila, donde en marzo se inauguró un centro para peregrinos, ha emergido con luz y capacidad propias de convocatoria, organización y acogida

De “fea y legañosa” a Las Edades del Hombre

Santa Teresa jamás quiso ser retratada. De ahí que, aunque es muy numerosa la iconografía teresiana, apenas haya un cuadro sobre ella, como ella era… Apenas, porque fray Juan de la Miseria, a hurtadillas, logró pintarla y así legarnos un impagable testimonio histórico, cuyo lienzo original se conserva en el ayuntamiento de Sevilla.

Pero he aquí que la misma Teresa cuenta que cuando el bueno de fray Juan de la Miseria le enseñó el retrato, no pudo reprimir el siguiente comentario suyo, bien célebre y que es bien significativo del gracejo, de la humanidad y del humor de la santa: «¡Dios te perdone, Fray Juan, que ya que me pintaste, me has pintado fea y legañosa!».

El retrato de fray Juan de la Miseria, como no podía ser de otro modo, ha formado parte de una de las decenas de exposiciones de este año sobre la santa. Concretamente se muestra en Alba de Tormes, donde Teresa falleció en 1582, en el quinto y último capítulo de “Teresa de Jesús: Maestra de Oración”, cuyo primeros cuatro capítulos se exhiben en tres templos distintos de la ciudad de Ávila, su cuna. Cuando, en principio,  el 9 de noviembre se clausure esta nueva edición, edición teresiana, de Las Edades del Hombre, 400.000 personas habrán visitado la exposición.

Otra exposición emblemática de este año teresiano tuvo lugar en Madrid, en la Biblioteca Nacional de España, entre mayo y julio. Y la santa fue santa de exposición –que Teresa bien merece una exposición- en el IVAM de Valencia, en el Ateneo de Sevilla, en Huelva y otras muchas capitales de provincia, amén de en las ya citadas 17 ciudades de la ruta “Huellas de Teresa”.

Hasta en los pucheros y en las televisiones

Sellos de Correos de España y de Portugal, la lotería nacional, la ONCE, la Ruta Quetzal, la Vuelta Ciclista a España, series de televisión, rehabilitación de edificios, restauración de imágenes, la nueva ruta o camino teresiano “De la cuna al sepulcro” entre Ávila y Alba…, Teresa ha estado este año hasta en los pucheros, haciendo buena su frase, también célebre y ahora también referida a ellas, «Hasta en los pucheros anda el Señor».

Precisamente este es el título de un programa que ha empezado a emitir la 2 de TVE en la sobremesa de los sábados y dedicado a la gastronomía del siglo XVI, el siglo de Teresa. TVE emitirá también este invierno el film para TV  “Teresa”, dos capítulos de cine sobre una mujer, una santa de cine que, sin duda, harán recordar aquella inolvidable serie televisiva “Teresa de Jesús”, que TVE emitió en 1982 y 1983 con ocasión del entonces cuarto centenario de su muerte, con guión y dirección de Josefina Molina y la magistral interpretación de Concha Velasco, quien también este año ha vuelto a ser Teresa.

Y ¿cuál es, pues, el “secreto”, de Teresa?

El gran Fénix de los Ingenios, Félix Lope de Vega y Carpio, haciendo memoria de ella, de la no menos grande Teresa de Jesús, al evocar su muerte en el otoño de 1582, en Alba de Tormes (Salamanca), escribió «con asombro del profundo, Teresa ilustre mujer, nace en Alba para ser sol de España y luz de mundo».

Adelantada a su tiempo, mujer de una pieza, cristiana cabal y admirable, mística y andariega, fémina e inquieta, Teresa de Cepeda y Ahumada, Teresa de Ávila, quinientos años después, no ha pasado de moda y su ejemplo sigue siendo válido y necesario para los creyentes de hoy y de todos los tiempos, como orgullo de lo mejor de nuestra tierra y de nuestra Iglesia, como fuente inagotable de virtud y crisol luminoso de verdadera sabiduría.

Pero, ¿cuál fue y sigue siendo su secreto? Esta pregunta nos la formuló, recién llegados, este verano la guía que iba a explicar los lugares teresianos. Cuando concluyó, volvió a preguntárnoslo. Y añadió: «¿Su belleza, su fama, sus obras…? La respuesta es que se fio totalmente de Dios».

Y yo me pregunté a mi mismo, a continuación: ¿y cómo fue posible, cómo sabemos lo que Dios quiere de nosotros para fiarnos de Él? La respuesta está en la vida interior, en la oración, en la perseverancia fiel, tantas veces costosa, de saber descubrir y discernir su voluntad. La respuesta está en seguir afanándonos en bajar y subir el cubo por el brocal del pozo del agua viva de la oración. Su respuesta es tratar con Él de amistad, que sabemos nos ama, aun tratando tantas veces a solas. Dios nos sigue hablando; Dios no deja de emitirnos señales. «Mil gracias derramando pasó por estos sotos con presura y yéndolos mirando vestidos los dejó de su hermosura».

Incluso, Dios habla en el silencio, ese silencio monacal y conventual tan querido por Teresa. Se trata, pues, de saber escuchar a Dios; de interpretar correcta y cristianamente sus señales y sus palabras, que son muchas veces renglones torcidos, donde un día comprobaremos que Él siempre escribe recto. Sus palabras no nos evitan a nosotros recorrer el camino: «Ahora te toca a ti», parece decirnos tantas veces; «¡Es tiempo de caminar!». Dios nunca nos lo da todo hecho, ni mucho menos.

El secreto de santa Teresa fue y sigue siendo ser, en tiempos recios y no tan recios, amiga fuerte de Dios, una amistad que nacía y se nutría de la oración y que se concretaba en un amor apasionando por Jesucristo y en su sacratísima humanidad: desde la cuna (los niños Jesuses  de los carmelos descalzos, las castañuelas y la alegría ante el Belén) al sepulcro (Teresa de Jesús fue también Teresa de la Cruz, una cruz en su propio cuerpo tantas veces enfermo y en tantas tribulaciones interiores como las que hubo experimentar) y desde el sepulcro a la Pascua.

El secreto de Teresa de Jesús fue su amor y fidelidad a la Iglesia, en la que pudo morir como hija fiel.  El secreto de santa Teresa fue su humanidad repleta,  que según se divinizaba mas era todavía mas humana. El secreto de Teresa de Jesús fue su amor filial a María: la abadesa de sus conventos (sus “palomarcitos”), su madre (en la imagen de la Virgen de Caridad de Ávila) desde los 12 años. El secreto de santa Teresa de Jesús fue Dios, Dios y su hermosura, el Dios inmutable y siempre amigo y cercano, el Dios de la misericordia y de las misericordias: el primado absoluto del Dios que nos ama absolutamente. El todo frente a la nada de las cosas.