10 de abril de 2014

El bogotazo: memorias de una tragedia



El Bogotazo…
memorias de una tragedia



Por Maria Teresa Villaverde Trujillo

Era la 1:15 p.m. de aquel viernes 9 de abril de 1948 cuando cae abatido por tres impactos de bala Jorge Eliécer Gaitán, un prominente político, aspirante a la presidencia por el partido Liberal y el mas firme candidato de Colombia. 


Un amigo de la infancia, (epd) quien no gustaba de aventuras pero a quien su destino a veces lo situaba en momentos excitantes, me envió un correo recordando lo que él presenció aquel día y en el lugar exacto mientras el trabajaba como fotógrafo para una prestigiosa empresa noticiosa:

... te voy a contar sobre como yo recuerdo la fecha del 9 de Abril de 1948..

"…Se estaba hablando de una conferencia Panamericana en Bogotá. Mr. Marshall de U.S.A. estaría presente,  llevaba la libreta de cheques para tratar de unificar Sur América.  El entonces portavoz de los pobres era el abogado Jorge Eliécer Gaitán Ayala,  líder de un movimiento popular colombiano y en aquel tiempo jefe del partido liberal colombiano (1947-1948),  quien a lo mejor o a lo peor era más idealista.  Es mi opinión –pero recuerda yo era muy joven-…” 

Continúa mi amigo de la infancia y testigo de aquella tragedia, recordando:

Fidel Castro
“...Fidel Castro, que había asistido a Bogotá, se dirigía hacia las oficinas de Gaitán, de repente suenan 3 disparos. Gaitán cae muerto y Fidel se pone una gorra como para cubrirse la cara y sale corriendo. Cuando lo pararon no le encontraron un arma de fuego y no lo pudieron encausar.  Pero el tiempo que estuvo corriendo pudo haber tirado el arma o dársela a un cómplice.  Eso estuvo por semanas y semanas en los periódicos en Sur América y desde luego en los noticieros de cine que yo cubría para una empresa noticiosa en uno de los países de Sudamérica. Yo tuve la mala suerte de estar detrás de Gaitán, así que no pude ver quien venía por el otro lado, sólo vi caer a Jorge Gaitán después del primer tiro; cuando se desplomaba puede verse en mi toma como el cuerpo fue golpeado por otras dos balas.  Yo nunca había sido testigo de un asesinato o intento. Por noches no pude dormir aunque hasta aquel momento yo no sabía quién era Jorge Gaitán pero me impactó mucho ver un hombre asesinado.. Yo vi a un hombre corpulento correr y aunque yo conocía a Fidel, no lo reconocí. Hoy en día con digitalización hubiera sido fácil de agrandar un cuadro y saber quién era."

"Es difícil recordar y admitir los errores que cometimos en aquella época por no pensar, y ver ahora a través de los siguientes años las verdaderas intenciones de los que ya perfilaban como futuros políticos nuestros”. 

He aquí la declaración del actual dictador cubano Fidel Castro recordando aquellos hechos, publicada en 1976 en un periódico gubernamental de la isla. Casualmente trata de limpiar su imagen:  

«…Las ideas marxistas, todavía incipientes, no tuvieron nada que ver con nuestra conducta, fue una reacción espontánea de nuestra parte, como jóvenes con ideas martianas, antiimperialistas, anticolonialistas y pro democráticas».   

 «Nosotros contactábamos con los estudiantes, hasta lo conocimos a él, a Gaitán, con quien nos reunimos y decidió apoyar el congreso de estudiantes (...) cuando estábamos allí tratando de crear la Federación de Estudiantes Latinoamericanos, entre otras cosas,... eran nuestros programas, más bien antiimperialistas y antidictatoriales, no socialistas todavía».

Pero ya antes había surgido en Colombia la "Union Nacional de Izquierda Revolucionaria", la que apoyaba la intervención del Estado en la economía y en la reforma agraria, así como un nacionalismo antiimperialista en cuanto a la política exterior. La asociación quedó disuelta en 1935.

Sin embargo, Nathaniel Weyl, escritor y economista norteamericano, quien fue miembro del Partido Comunista de Estados Unidos desde 1933 a 1939, autor del libro Red Star Over Cuba, the Russian Assault on the Western Hemisphere (1961) escribió: 

“According to police records Fidel Castro was suspected of personally of assassinating Gaitán, as his Cuban travelling companion, Rafael del Pino was seen with the fascist former mental patient, Juan Roa, an hour and a half before the assassination.-Castro had attempted to recruit Gaitán earlier to his cause, but Gaitán had repeatedly declined and was assassinated because he was too politically influential and would have countered the Cold War objectives of the USSR in the Caribbean…"

Aquel país ejemplar mas tarde empezó a verse como el mas violento del continente.

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