¡Primavera!

Para quienes vivimos en el hemisferio Norte, hoy nos comienza la primavera. Los astrónomos se las han arreglado para poder precisar con exactitud la hora y hasta el minuto de su llegada. La primavera es una de las cuatro estaciones que existen en las zonas templadas, porque en las zonas más al norte sólo se conocen dos estaciones: la del frío intenso y la del frío menos intenso. Y las zonas aledañas al ecuador de la Tierra experimentan igualmente dos estaciones, que para ellos son la de la seca y la de las lluvias.

La palabra «primavera» proviene de prima (primer) y vera, verdor: es el primer verdor después de los largos y fríos días de invierno. La naturaleza se reaviva, en los árboles brotan nuevas ramas y hojas, y comienzan a aparecer las flores.

Curiosidades de las estaciones

Contrariamente a lo que piensa mucha gente, la sucesión de las estaciones no se debe a que en su movimiento elíptico la Tierra se aleje y acerque al Sol. Esto tiene un efecto prácticamente imperceptible en el clima. La verdadera causa es la inclinación del eje de giro del globo terrestre. Este eje se halla siempre orientado en la misma dirección y por tanto los hemisferios boreal y austral (polos Norte y Sur) son desigualmente iluminados por el Sol. Cada seis meses la situación se invierte.

Si el eje de la Tierra no estuviese inclinado respecto a la Eclíptica, el Sol se hallaría todo el año sobre el ecuador; culminaría todos los días del año a la misma altura sobre el horizonte, que sería igual a la misma latitud, y no habría estaciones.

Las estaciones no tienen la misma duración, ya que la Tierra recorre su trayectoria alrededor del Sol con una velocidad variable. Va más de prisa cuanto más cerca está del Sol y más lentamente cuanto más alejada se encuentra de él. Esto es una consecuencia de la ley de gravitación universal de Newton.

El rigor de las estaciones en cada hemisferio no depende de la distancia al Sol, sino de las características propias de cada hemisferio. Como el hemisferio Norte tiene más superficie sólida que el hemisferio Sur, cuando es verano en el Norte la superficie se calienta más rápidamente y remite de nuevo el calor a la atmósfera, generando temperaturas más elevadas.

En cambio, como el hemisferio Sur tiene una superficie cubierta mayormente por agua, en el verano del Sur el calor proveniente del Sol es absorbido por el agua de los océanos y es remitido nuevamente a la atmósfera de modo más lento, por lo que la temperatura alcanzada no es tan alta como en los veranos del Norte.

Editado de Wikipedia
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