Frank Calzón:
Sin el permiso de Yoani Sánchez
En días recientes la prensa ha
publicado artículos y comentarios sobre la campaña de pancartas en el metro de
Washington, que urge al presidente Barack Obama a eliminar las restricciones
comerciales y de viajes a Cuba. El grupo detrás de la campaña con el sugestivo
nombre de CubaNow (Cuba Ahora) hace su súbita aparición sin que se hayan
reportado actividades auspiciadas por el grupo en el pasado.
El único nombre conocido, de los pocos
que se mencionan, es el de Yoani Sánchez, la valiente bloguera cubana que es
perseguida por el régimen y que ha recibido un sinnúmero de galardones
internacionales por su trabajo. En el momento en que CubaNow comienza su
campaña en la capital norteamericana, Yoani Sánchez se encuentra en los Estados
Unidos y se ha podido conocer que no había aprobado el uso de su nombre y su
fotografía, prominentemente desplegada junto a la del Presidente Obama en los
carteles del metro washingtoniano.
Lamentablemente, en más de una ocasión
las fotos de Yoani Sánchez, copiadas del Internet, han sido publicadas sin
contar con ella, y hasta han publicado colecciones de sus crónicas, no obstante
los derechos de copyright.
Pero que hayan tratado de utilizar a
Yoani Sánchez, sin su permiso, para una campaña que presenta una visión
distorsionada de la Cuba de hoy, y que le pide al presidente Obama que
unilateralmente levante todas las sanciones en contra de la dinastía castrista,
no es el único asunto preocupante de la iniciativa. La cabeza visible del
proyecto, Ricardo Herrero, que dice ahora llamarse Ric Herrero —con una
pronunciación decididamente anglosajona—, se ha negado a dar a conocer el costo
de la campaña publicitaria y, más preocupante aún, la fuente de los dineros que
la hacen posible.
Esto acontece en un momento en que el
secretismo es considerado por los norteamericanos una falta imperdonable en lo
que concierne a la política y a los políticos. Los norteamericanos demandan y
esperan en cuestiones de política una transparencia total. Por ejemplo, cuando
un ciudadano hace una contribución a una campaña electoral, la cantidad, su
nombre, profesión y dirección aparecen en un documento público.
Y si la transparencia en la política
interna es importante, cómo no lo va a ser en relación a una iniciativa para influir
en la política de la Administración con un gobierno que la semana pasada fue
identificado una vez más por el Departamento de Estado como un gobierno que le
presta ayuda el terrorismo internacional. Los otros países en la lista son
Siria, Sudan e Irán.
La imagen de jóvenes cubanoamericanos
sonrientes, con unas sonrisas dulces y adorables, no es suficiente respuesta a
las preguntas que se hacen sobre CubaNow. El Sr. Herrero dijo que su
organización es un grupo de la nueva generación de cubanoamericanos, pero no
dijo cuán numerosa es la membresía y no aportó nada sobre la historia de cómo
surgió y se organizó la entidad. ¿Qué se esconde detrás de esas dulces
sonrisas? Nada que aparece en la campaña de CubaNow puede molestar al régimen
cubano. Ojalá que detrás de las dulces sonrisas no hayan sorpresas, como las
hubo cuando bajo un cargamento del dulce azúcar cubano aparecieron armas
letales que iban de contrabando para el régimen asesino de Corea del Norte.
Lo que sí se sabe es que Ric Herrero
fue vicedirector del controversial Cuba Study Group(Grupo de Estudios Cubanos)
dirigido por el hombre de negocios Carlos Saladrigas. Y que fungió además como
tesorero del fracasado Comité de Acción Política La Nueva Mayoría Cubano
Americana, también fundado por el Sr. Saladrigas, a quien le atraen las
supuestas oportunidades de hacer negocios en la Isla, debido a que los
trabajadores cubanos no tienen derecho a la huelga, ni sindicatos obreros
independientes, y el salario promedio mensual de los cubanos son unos veinte
dólares.
CubaNow dice favorecer una
conversación sobre la situación cubana y la política norteamericana hacia la
Isla, y en eso existe un consenso generalizado entre todos los cubanos, aunque
los que viven en la Isla no tienen la posibilidad de participar en ningún
debate sobre el tema, y los de CubaNow no han incluido en sus pancartas una
sola alusión a la represión y la falta de libertades.
Cualquier persona interesada en
conocer la Cuba de hoy solo tiene que leer las crónicas en Generación Y, el
blog de Yoani Sánchez. Allí encontrará el diario acontecer de la nación
caribeña: la falta de libertades, los abusos perpetrados en contra de los
disidentes, la miseria, la pobreza y el empecinamiento de la gerontocracia en
el poder.
En un artículo del verano pasado,
Yoani dijo: "En un momento en que los periódicos dan lecciones de que los
gobiernos no se pueden salir con la suya en cuanto al secretismo, es penoso
–cuando menos– el papel conformista de la prensa oficial cubana". En otra
ocasión –escribiendo sobre el Censo de Población y Vivienda– dijo: "No es
lo mismo que nos cuenten a que cuenten con nosotros". Y en otro post,
viendo la televisión cubana, se refirió a "los rostros de quienes en este
país han convertido la discrepancia en un delito y la protesta cívica en una
traición".
Sobre la muerte de Oswaldo Payá
escribió un post titulado Descanse en Libertad, Oswaldo Payá: "Payá
padeció durante años la vigilancia constante sobre su casa, los arrestos
arbitrarios, los mítines de repudio y las amenazas. Nunca desaprovechó un
minuto para denunciar la situación penitenciaria de algún disidente, ni la
condena injusta de otros".
La CubaNow, la Cuba de Ahora que
describe Yoani, es la Cuba de Oswaldo Payá. Qué pena que haya cubanos que no
sigan ese ejemplo de estar dispuestos a prestarles el eco de su voz a los
hombres y mujeres que sufren las arbitrariedades, las golpizas y los crímenes
del régimen castrista.
Director
ejecutivo del Centro para Cuba Libre en Washington. Frank.Calzon@cubacenter.org
Remitido por Blanca DePriest