1 de diciembre de 2013

Adviento




Adviento es una palabra de etimología latina, que significa “venida”. Es el tiempo litúrgico compuesto por las cuatro semanas que preceden a la Navidad como tiempo para la preparación al Nacimiento del Señor.

El adviento tiene como color litúrgico al morado que significa penitencia y conversión, en este caso, transidas de esperanza ante la inminente venida del Señor.   Es un periodo de tiempo privilegiado para los cristianos ya que se nos invita a recordar el pasado, vivir el presente y preparar el futuro.

Recordar el pasado: El adviento es memoria del misterio de gracia del nacimiento de Jesucristo. Es memoria de la encarnación. Es memoria de las maravillas que Dios hace en favor de los hombres. Es memoria de la primera venida del Señor. El adviento es historia viva.

Vivir el presente:  El adviento es llamada a vivir el presente de nuestra vida cristiana comprometida, y a experimentar y testimoniar la presencia de Jesucristo entre nosotros, con nosotros, por nosotros. El adviento nos interpela a vivir siempre vigilantes, caminando por los caminos del Señor en la justicia y en el amor. El adviento es presencia encarnada del cristiano, que cada vez que hace el bien, reactualiza la encarnación y la natividad de Jesucristo.

El adviento prepara y anticipa el futuro:  Es una invitación a preparar la segunda y definitiva venida de Jesucristo, ya en la “majestad de su gloria”. Vendrá como Señor y como Juez. El adviento nos hace proclamar la fe en su venida gloriosa y nos ayuda a prepararnos a ella. El adviento es vida futura, es Reino, es escatología.

El adviento es tiempo para la revisión de la propia vida a la luz de vida de Jesucristo, a la luz de las promesas bíblicas y mesiánicas. El adviento es tiempo para el examen de conciencia continuado, arrepentido y agradecido.

El adviento es proyección de vida nueva, de conversión permanente, del cielo nuevo y de la tierra nueva, que sólo se logran con el esfuerzo nuestro -mío y de cada uno de las personas- de cada día y de cada afán.

El adviento es el tiempo de María de Nazaret que esperó, que confío en la palabra de Dios, que se dejó acampar por El y en quien floreció y alumbró el Salvador de mundo.

revistaecclesia.com 

La Habana, asesinada por una guerra que nunca tuvo



La Habana, asesinada por 
una guerra que nunca tuvo

Juan Antonio Madrazo Luna

LA HABANA, Cuba, noviembre, www.cubanet.org -La Habana es una ciudad atravesada por una guerra que nunca tuvo lugar. Es una ciudad  a la que hoy le falta decencia. Su tristeza es muda, pues todos los días se nos presenta solitaria y bochornosa.

Le sobra la vulgaridad, huele muy mal, huele  a semen disecado, también a azufre. En cada esquina, o bajo una ceiba, la gente no deja de tropezar con bolsitas de santería, gallos, paticas de chivos, flores, girasoles y otras ofrendas que también son  lanzados al mar. La urbe se nos presenta bruja. Rodar el coco es solo una parte del aquelarre que a muchos asusta.

Todos los días muere de una muerte prematura por las numerosas ausencias que sufre. Los solares continúan siendo cementerios de ilusiones, los grandes laureles de la avenida Carlos III, los lumínicos, bares y victrolas desaparecieron tras el movimiento sísmico de 1959.

Según el artista y fotógrafo Nilo Julián González Preval, La Habana es una ciudad desencantada;  ella fue la vanguardia de la arquitectura en los  años 50 en América Latina hoy es una de las más tristes y desoladas del mundo; apestosa que no dispone de baños públicos, pues las autoridades la han convertido en el gran urinario de las Américas. Atravesar el Parque Central es normal encontrarte una persona defecando a las 12 del día o enseñando sus partes más intimas.

Y  añade Nilo Julián:  Es la única ciudad del mundo en la cual he visto que los  parques se han convertido en jaulas, cerrados con llaves y candados, particularmente los que hoy administra la Oficina del Historiador de la Ciudad. Ya no podemos  sentarnos a la sombra del Titán Antonio Maceo. Las calles Monte, Galiano y Muralla eran las vitrinas, pero la revolución  verde olivo desmanteló todo ese glamour.

Es la ciudad travestida e hipócrita en la que se pierde el acento del Caribe, pero el mestizaje resulta ser más sabroso que en República Dominicana. En ella cohabitan, con Marilyn Mason y el Che, ambias cotidianos, turistas, lesbianas, musulmanes, rastafaris, drag queens, chicos punk de cresta inmensa, mendigos, policías-proxenetas, pingueros, freekis interactivos, babalawos y emos.

La Rampa sigue siendo machista, travesti pero también lesbiana. Mientras un tramo huele a fresa, el otro huele a María (marihuana).  La intimidad termina siendo pública; los ritos reservados a lo oscuro son constantemente espiados.
Es la puta ciudad que fácil se entrega al extraño, pues el tropical mercado erótico sugiere una sexualidad cínica y despiadada. Los turistas eventuales trafican con el deseo del otro y no dejan de sobarse los bolsillos al ser arrinconados por mulatas que invitan a tocar  cinturas baratas. Los descendientes del almirante Rodrigo de Triana, con ínfulas aun  de conquistadores, no dejan de gritar ¡Negras a la vista! Para ellos la Habana sigue siendo la Tierra Santa.

La Habana Difunta de Cabrera Infante es solo un espejo reservado a la memoria.  Aquí las orquestas sinfónicas tuvieron su paraíso, pero hoy  también a La Habana le falta el guaguancó, el bolero y el feeling, incluido el espíritu de Loreta la Faraona, Mulengue, la Marquesa y el Caballero de Paris, iconos que hoy son sustituidos por la presencia de la Madre Teresa de Calcuta, Lady Di, Agustín Lara, entre otros personajes allende los mares que comienzan a ocupar espacios en el distrito financiero metropolitano.

Mi ciudad es un espejo cruel cuyas caras no me agradan. Los bicitaxis humillan la ciudad, la gente mal vestida permite que se le vean más las arrugas; las diferencias entre la Habana Norte y la Habana Sur se agudizan: En los barrios con sabor a rumba, el precio de la desigualdad se impone.


Nueva y exitosa medicina para el corazón: la Misericordina



Nueva y exitosa medicina
para el corazón: la Misericordina

La Misericordina que recetó Francisco  a cientos de fieles en la plaza de San Pedro el pasado 17 de noviembre como remedio ‘espiritual’ a los males que acucian a la sociedad se vende como churros.

Pocos días después del anuncio del Pontífice, una empresa de Nápoles llamada Fars ‘robó’ la idea a Francisco y ya ha empezado a comercializar el ‘milagroso’ medicamento: una cajita que contiene dentro un rosario y una estampa de la Divina Misericordia que, según el Papaproporciona “ayuda espiritual para el alma y para difundir el amor, el perdón y la fraternidad”.

Así que gracias a esta pequeña empresa, la Misericordina ya tiene su primer ‘genérico’, cuya demanda es altísima a pesar de tratarse de un ‘fármaco’ tan nuevo“Son 59 pastillas que ofrecen el amor, el perdón y la fraternidad”, dijo el Papa en alusión a las cuentas del rosario.

 Al parecer el ‘fármaco’ se llamaba originalmente ‘Miserikordyna’ y fue inventado por un seminarista polaco en 2011. Según el Pontífice argentino sus efectos son inmediatos: “Hace bien al corazón, al alma y a toda la vida”, bromeó ante cientos de personas congregadas para el tradicional rezo del Ángelus el domingo 17 de noviembre.

Aunque muchos pensaron que se trataba de una broma, ese día un grupo voluntarios distribuyó entre los fieles más de 20.000 cajas con el ‘principio activo’ de la Misericordina.

Según Konrad Krajewski, el capellán polaco de Francisco que tuvo la idea de presentar la primera caja del ‘medicamento’, el Papa se rió al leer el prospecto, donde se indica que el remedio no tiene “ninguna contraindicación”, ni siquiera para las mujeres embarazadas, y que se puede utilizar de forma preventiva “una vez al día” y “en caso de emergencia, tantas veces como lo necesite el alma”.

En Roma, la ‘Misericordina’ sólo se distribuye en la sacristía de una Iglesia próxima al vaticano que se ha transformado en una pequeña tienda. El ‘Santuario de la Divina misericordia’ vende cajas a 3 euros cada una.

Los fieles se presentan en esta pequeña tienda donde, sólo durante la jornada del jueves, se vendieron 2.000 unidades en pocas horas.  Los responsables de este peculiar comercio ya han encargado al menos 10.000 cajas más de Misericordina.  Todos los beneficios que se obtengan con estas ventas se donarán a obras de caridad.

30 de noviembre de 2013

Apuntes históricos sobre la serie "Isabel" de la tve.




Apuntes históricos sobre la serie "Isabel" de la tve:

El Santo Niño de La Guardia


¿Sabías que la historia delSanto Niño de La Guardia” es real?  ¿Sabías que ese niño fue canonizado y considerado un mártir? ¿Sabías que este caso es uno de los autos inquisitoriales más estudiados?

El Santo Niño de La Guardia es el caso del presunto asesinato ritual de un niño, de cuya existencia no hay ninguna prueba, cometido por judíos y judíos-conversos a finales de la década de 1480 en la localidad de La Guardia (Toledo), seguramente inspirado por la leyenda antijudía llamada calumnia de la sangre.  

Por este supuesto crimen ritual fueron procesados por la Inquisición varios conversos, además de dos judíos, procesados por las autoridades civiles, todos ellos quemados vivos en Ávila el 16 de noviembre de 1491. Se conservan algunos documentos del proceso (especialmente, el proceso completo contra uno de los acusados, Yosef Franco), que demuestran que hubo múltiples irregularidades y que sobran evidencias de que el crimen nunca se cometió realmente. 

La mayoría de los historiadores considera que el proceso propició un clima antijudío para permitir una mejor acogida al decreto de expulsión de los judíos por los Reyes Católicos, que se promulgaría sólo meses después (en marzo de 1492).
  
En las  actas que se conservan, no aparecen denuncias por el hecho en sí. Tampoco se encontró cadáver alguno. El no hallar el cádaver ha servido de argumento tanto a los que dan por cierto el asesinato como a los que lo niegan. Para los primeros, porque alegan que el Niño, tras el martirio, resucitó. Los segundos, porque nunca sucedió tal martirio.

Los historiadores coinciden en que, a pesar de las irregularidades, el caso impactó en la opinión pública por lo escabroso del tema.

Así se relataban los hechos, según Teresa Irisarri: “Fue asesinado y martirizado por unos judíos, que lo llevaron con embustes a una cueva, y allí le sacaron las mantecas y también el corazón con grande tormento, para luego crucificarlo y hacer magia con sus despojos. Este hecho, fuera verdadero o no, semejante ensañamiento con la criatura, causó espanto y conmocionó a toda la población española.”  

La leyenda construida con las sucesivas confesiones bajo tormento, se refiere a que ciertos conversos, tras asistir a un auto de fe en Toledo, planearon vengarse de los inquisidores mediante artes de hechicería. Para hacer su conjuro necesitaban una hostia consagrada y el corazón de un niño inocente.

 Juan Franco y Alonso Franco secuestraron al niño junto a la Puerta del Perdón de la catedral de Toledo y lo trasladaron a La Guardia. Allí, el día de Viernes Santo simularon un juicio. El niño, al que en la leyenda se le llama Juan (en otras versiones se le llama Cristóbal) y se dice que era hijo de Alonso de Pasamonte y de Juana la Guindera (a pesar de que nunca apareció ningún cadáver), fue azotado, coronado de espinas y crucificado, del mismo modo que Jesucristo. Le arrancaron el corazón, que necesitaban para el conjuro. 

Y continúa la leyenda: "En el momento de la muerte del niño, su madre, que era ciega, recobró milagrosamente la vista. Tras darle sepultura, los asesinos robaron una hostia consagrada. Benito García iba hacia Zamora llevando la hostia y el corazón para recabar la ayuda de otros conversos para realizar su conjuro, pero fue detenido en Ávila a causa de los resplandores que emitía la hostia consagrada, que el converso había escondido entre las páginas de un libro de rezos. Gracias a su confesión, se detuvo a los otros participantes en el crimen.

En aquella época corrían historias semejantes, reales o supuestas, en otros lugares de España. Se comentaban herejías similares cometidas por los judíos, llevando a cabo estos actos sacrílegos en la fecha del viernes santo.

Por su parte, en la página Web de la Arquidiócesis de Madrid se puede leer que “hubo falsos conversos que seguían practicando un judaísmo casero con repercusiones en el orden social. Los Reyes Católicos, fracasados los esfuerzos persuasorios del 1478, solicitaron del papa Sixto IV la bula para establecer la Inquisición; en el 1480 ya quedaba nombrado el tribunal, pero no por ello estaba asegurado el orden; estaban implicadas personas judías poderosas en dinero y número…”  

El mundo de la literatura ha dejado constancia de este suceso o leyenda del siglo XV en los alrededores de Toledo. Lope de Vega  escribió “El Niño Inocente” y Quevedo se ocupó de él, proponiendo en carta escrita al rey se dignase disponer las cosas para que el santo Niño compartiera el patronato de España con Santiago; afirmaba que «puede interceder a Dios, como no puede otro alguno, por la pasión que Cristo pasó por él y por la que él pasó por Cristo».

Tras la supuesta muerte del Santo Niño, se le atribuyen también varias curaciones milagrosas. Ya en el año 1501 hay referencias a los lugares de culto en los que se le venera que son los mismos en los que supuestamente sufrió y fue enterrado. La villa de La Guardia lo tomó por Patrón y señala el día de su fiesta: 25 de septiembre. 

El cardenal Siliceo apoyó en 1547 su estatuto de limpieza en la devoción que se presta al Santo Niño. Consta la veneración que los reyes Fernando V, Carlos I y Felipe II le tuvieron. Y se sabe que el papa Pío VII confirmó su culto en 1805.