9 de mayo de 2013

NOS DEJA ALFREDO LANDA



Nos deja Alfredo Landa


Alfredo Landa ha muerto hoy a los 80 años en Madrid. La historia del cine español no se puede concebir sin el actor que dio nombre a un subgénero, el Landismo,   durante los años sesenta y setenta.

Sus últimas apariciones públicas datan de 2008, cuando recibió el premio de la Unión de Actores por su papel en «Luz de domingo», de José Luis Garci, la Medalla de Oro del Ayuntamiento de Madrid y el Premio Príncipe de Viana a la Cultura 2008   en su tierra, Pamplona, y de manos del Príncipe de Asturias. Fue su retirada, tras haber recibido el año anterior el Goya de Honor, el tercero de su carrera después de los obtenidos como mejor actor por «El bosque animado» (1987) y «La marrana» (1992).

«Tengo tanto dentro... este Goya de Honor se lo debo a mi profesión que ha sido lo mejor de mi vida, lo que más aprecio», dijo Landa en un discurso emocionado, entrecortado, casi incomprensible e interrumpido sin parar por los aplausos de sus compañeros. El actor navarro se mostró perdido durante su intervención y evidenció unos problemas de salud nunca definidos claramente pero que le llevaron a desaparecer de la vida pública.

Pese a ello, su recuerdo permanece vivo entre el público y entre sus amigos. Así lo demostró José Sacristán en la última entrega de los Goya. «Sólo echo de menos que Alfredo Landa me hubiera abrazado», dijo Sacristán al recoger su Goya por «El muerto y ser feliz». Fue él precisamente, junto a Miguel Rellán, el encargado de entregarle cinco años antes su galardón de honor a Landa.

Un Landa que evitó las polémicas que habían rodeado sus problemas con quien había sido director de su último trabajo y un amigo cercano hasta entonces, José Luis Garci. Juntos hicieron «Las verdes praderas», «El crack», «El crack II», «Canción de cuna», «Historia de un beso», «Tiovivo c.1950» y «Luz de Domingo», pero las malas relaciones de Garci con la Academia de Cine le llevaron a negarse a entregar a Landa su Goya de Honor y ahí se rompió una amistad de cuarenta años.

Un hombre con mucho carácter

Porque si algo ha demostrado Landa en su vida profesional y personal ha sido carácter, mucho carácter. «No hablo mal de la gente, sólo constato la realidad», afirmó en una entrevista con Efe en 2008 con motivo de la publicación de su biografía «Alfredo el Grande. Vida de un cómico».

En ese libro calificaba al productor José Luis Dibildos de «timador profesional» y a la actriz Gracita Morales de  “caprichosa, despótica e intratable, pero también halagaba a los actores Miguel Ángel Rellán o Tina Sainz, o al cineasta José Luis Cuerda.

Una larga carrera de la que se retiró porque perdió la pasión
Nombres que rodearon una larga carrera profesional -más de 120 películas- de la que se retiró porque perdió la pasión. Títulos como «Atraco a las tres», «Historias de la televisión», «La verbena de la Paloma», «La niña de luto», «Nobleza baturra», «Los guardiamarinas», «¿Qué hacemos con los hijos?», «Las que tienen que servir», «Los subdesarrollados» o «Cateto a babor». Todos ellos parte de ese fenómeno, el «landismo», una «forma de ser, de actuar y de ver la vida», como él lo ha definido. Una época que marcó el devenir del cine español y construyó la memoria histórica del españolito de a pie.

Con Garci, la calidad actoral
En 1970 llegaría «No desearás al vecino del quinto», una película que arrasó en taquilla hasta tal punto que solo «Torrente 2» consiguió desbancarla como la más vista del cine español. Aún quedarían muchas del Landismo, como «Vente a Alemania, Pepe» o «Manolo, la nuit».

Pero en 1979 llegó «Las verdes praderas», su primera colaboración con Garci, un antes y un después en la carrera de Landa y la primera muestra de una calidad actoral que había pasado bastante desapercibida hasta ese momento. Landa enlazó títulos como «El crack», «La próxima estación», «El crack II» y «Los santos inocentes», el filme de Mario Camus basado en la novela de Miguel Delibes, que supuso su consagración internacional. Consiguió el premio al mejor actor en Cannes, ex-aequo con su compañero de reparto Paco Rabal. Los dos dieron una soberbia lección con unos papeles castellanos, dramáticos y llenos de humanidad.

Es difícil olvidar la imagen de Landa -Paco, el Bajo- oliendo el campo como un perro para buscar las piezas cazadas por su «señorito Juan Diego (Los santos inocentes). Un papel que le ha acompañado desde entonces, pese a que después participó en «La vaquilla», «Tata mía», «El bosque animado» o «La marrana». Con «Luz de domingo» se despidió de la actuación, pero no así del mus o de los cócteles, sus otras dos grandes pasiones.

«Soy el que mejor juega al mus desde que se inventó y hago los mejores cócteles porque les pongo amor, que es un ingrediente que no le pone la gente. Cuando mezclo los ingredientes, pienso en lo feliz que vas a ser cuando te lo tomes...».

Reproducido de La Razón, Madrid,
9 de mayo de 2013

** Alfredo Landa fue uno de mis actores preferidos del cine español, por su versatilidad, el gracejo que impartía a sus personajes y la maestría en sus actuaciones. Disfruté en Cuba "La Niña de Luto" y otros filmes más de aquellos sus primeros tiempos de actor. Eran películas de la década de los 60, cuando en Cuba se le hacían algunos guiños al cine español. Luego, en EEUU,  me perdí más de tres décadas sin poder ver ninguno de sus filmes hasta la llegada de los VCR, los DVD y la TVE Internacional, que me permitieron ver con retraso, aunque siempre con la actualidad imperecedera que les otorga la calidad de sus actores, varias de sus películas, y hasta su última, "Luz de domingo".   Precisamente hace apenas dos semanas TVE presentó  "La Vaquita", en la que Alfredo Landa ofreció una de sus mejores actuaciones.  

Descanse en paz este genial actor, capaz de llenar toda una época del cine español.

CANCIONES PARA LA MADRE, LO SIENTO, LAURA PAUSINI

OCHO CANCIONES PARA LA MADRE
( V )
LO SIENTO
LAURA PAUSINI


http://www.youtube.com/watch?v=Lm-3iB5lQTM

REFRANES EN DESUSO


Refranes religiosos tradicionales  ya en desuso, al menos en varios países:

Tres jueves hay en el año
que relucen más que el sol:
Jueves Santo, Corpus Christi
y el jueves de la Ascensión.

y ello es porque tanto la festividad  de Corpus Christi como la de la Ascensión del Señor han sido trasladadas a los domingos que les suceden por las Conferencias Episcopales de dichos países.

EL RON BACARDI NACIÓ EN CUBA



El Ron Bacardí nació en Cuba

«...un gran nombre cubano, Bacardí,
que injustamente quisieron confiscar 
los estafadores de la fe pública.»

 ROSENDO ROSELL 
(Vida y Milagros de la Farándula de Cuba VI)

 
 Por María Argelia Vizcaíno

Parte I de II - El comienzo de una gran empresa.
 
Para saber el origen del ron Bacardí, el mejor y más conocido del mundo, debemos estudiar primero un poco de la misteriosa historia que lo envuelve.
 
La real Academia de la Lengua define como ron: «Licor alcohólico de olor y sabor fuertes, que se saca por destilación de una mezcla fermentada de melazas y zumo de caña de azúcar, y al cual se da con caramelo color rojizo.» También sostiene que el vocablo proviene del inglés rum, que es la manera corta de nombrar rumbullion, un tipo de aguardiente que existía en las Antillas en 1650, que proviene de un antiguo vocablo de Devonshire, que significa turbulencia o tumulto, que algunos consideraban sinónimos del ron.

Con el crecimiento de la industria azucarera en el Nuevo Mundo, nos relata Fernando Ortiz en «El Contrapunteo Cubano del Tabaco y el Azúcar» que «...por todas las Antillas se destiló el alcohol de las melazas y se hicieron licores. Aquí fue aguardiente de caña el AUXDE-VIE de las Antillas francesas, el RHUM de Jamaica, el BITTER de Trinidad...»
 
Existe una fuerte tendencia a creer que fue en Jamaica donde por primera vez se comenzó la destilación del aguardiente para convertirlo en ron. Allí originalmente fermentaban las espumas resultantes de la defecación del guarapo de los ingenios y la mezclaban con las vinazas residuales de la destilación y melazas ordinarias, obteniendo rones de un aroma intenso y penetrante.
 
Se supone que en 1820 ya en Cuba se fabricaba ron por lo escrito por José Agustín Govantes: «...La prohibición de los derechos impuestos al ron y a los aguardientes extranjeros han naturalizado este ramo de la industria...» El historiador Jacobo de la Pezuela anotó que en 1827 la producción de aguardientes cubanos se obtenían de 300 establecimientos con alambique (aparato para destilar); el ron se fabricaba en «todas las fincas bien montadas, en un departamento anexo y a veces separado del edificio donde están montados los demás trenes y que lleva el nombre mismo del artefacto que contiene: el alambique.»
 
El ron cubano se diferencia del jamaicano porque en el de Cuba «la bebida se obtiene de la fermentación de melazas de caña, seguida de la destilación y rectificación posterior. Sus características generales lo califican como ron ligero, de aroma muy fino, sabor suavemente dulzón y apropiado para tomar solo o con coctel.» El aroma es delicado y perdurable, diferenciándose esto también del tipo de Jamaica y de los rones de melaza de remolacha.

Por la década de 1830 llegó a Santiago de Cuba, procedente de Sitges, Barcelona, Facundo Bacardí Mazó junto a varios de sus 8 hermanos (Magín, José, Juan). El día 5 de agosto de 1843 contrajo matrimonio con la joven Lucía Victoria Moreau, hija de unos emigrantes franco-haitianos dueños de el cafetal El Amor.

Como había crisis comercial en la ciudad, Facundo consiguió enrolarse a bordo de la embarcación La Esperanza que debía llegar a la isla francesa La Martinica. Un fuerte huracán demoró su regreso a Santiago, y mientras esperaba en una taberna a que pasara el mal tiempo, entabló amistad con un francés vinatero. El joven Facundo era tan hospitalario, que llevó al nuevo amigo a su casa y allí lo alojó hasta que llegara el barco que lo llevaría a Marsella. Cuenta la leyenda que el francés en agradecimiento le confesó el secreto de una fórmula muy especial para poder fabricar un ron más suave, fino, agradable y fuerte a la vez.
 

Es el 24 de febrero de 1862, que José Bacardí y su socio francés José León Bouteiller compraron una pequeña destilería llamada El Marino, que tenía un antiguo alambique de hierro fundido, unos pocos barriles de añejamiento y una gran colonia de murciélagos. Estaba ubicada en la calle Marina Baja No. 32, Santiago de Cuba, otorgando un poder especial a Facundo para que lo administrara. El 6 de mayo de ese año, otro documento muestra un convenio bajo las siguientes bases: « 1.- José Bacardí en calidad de socio Comanditario ha entregado tres mil pesos en efectivo, y Facundo y José León ponen su trabajo personal.»
 
Rápidamente el aguardiente que se obtenía del alambique comprado comienza a mejorar notablemente su sabor, por las mezclas ejercidas; al mismo tiempo almacenan en barriles de roble cierta cantidad de aguardiente puro, para sacarlo al cabo de 12 años como el cotizado Bacardí 1873 o Extra Seco.
 
Por eso en 1892 ganó su primera medalla de excelencia al ser presentado en la exposición Internacional de Filadelfia que celebraba el Centenario de los Estados Unidos de América, coincidiendo con el inventor Alexander Graham Bell que presentó por primera vez el teléfono.
 
Desde entonces la fórmula secreta se llenó de mitos al querer ser imitada por todos los fabricantes de ron. Algunos decían que era porque junto a la nave de añejamiento pasaba el tren y esas vibraciones mejoraban el color y el sabor, otros argumentaban que ese sabor especial se debía a que los barriles de roble donde se añejaba, antes habían sido usados para envejecer whisky.
 
Lo cierto es que nadie pudo quitarle el mérito a la familia Bacardí, por haber creado el mejor ron del mundo en «la tierra más hermosa que ojos humanos vieron.»
 
(Continuará)

Remitido por Joe Noda

FRASE DE SABIDURÍA

8 de mayo de 2013

BERTA SOLER HACE LLEGAR AL PAPA FRANCISCO EL DOLOR DE CUBA



Berta Soler
hace llegar al Papa Francisco
el dolor de Cuba


Cubanet.com / La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler saludó este miércoles al papa Francisco y le estrechó la mano durante una audiencia pública efectuada en el Vaticano. “Ha sido muy lindo. Esto es el punto culminante de mi gira. Llevo a Cuba la bendición del papa Francisco, es algo muy grande que el pueblo de Cuba necesita”.  

Soler estaba en primera fila cuando el Papa bajó a saludar a los invitados. Contó desde Roma que tenía un rosario en la mano y desplegó la bandera cubana para que el pontífice supiera que era de Cuba.

“Su Santidad, somos las Damas de Blanco de Cuba, familiares de cientos de presos  políticos. Necesitamos que ayude a Cuba, sus bendiciones para el pueblo de Cuba. Seguiremos rezando por usted”, le dijo Soler al Papa durante el breve encuentro.

“Sigan adelante”, le contestó Francisco, y bendijo a Cuba ante el pedido de la líder de las Damas de Blanco.

Como es costumbre, Soler asistió a la audiencia vestida de blanco. Ella y el grupo de mujeres comprometidas con los derechos humanos en la isla habían solicitado al predecesor de Francisco, Benedicto XVI, una entrevista durante su visita a Cuba el año pasado. [ pero nunca fueron atendidas por los responsables de programar la visita a Cuba de Benedicto XVI].