2 de diciembre de 2012

ADVIENTO



Adviento
El Señor nos llama a recuperar la alegría de la fe.
Viene a nuestro encuentro, en cada circunstancia,
para llenarnos de valor y de entereza,
de audacia y de esperanza.
¿Seremos capaces de  dejarnos guiar y llevar por El?

Vino, viene y vendrá el Señor,
para infundirnos ánimo
y sacarnos de tantas fosas en las que nos hemos metido.
Necesitamos a Jesucristo.

 ¡Bienvenido sea el Adviento, tiempo de esperanza
y días que nos adentran en los caminos de Dios!  

NOTICIAS INCREÍBLES



NOTICIAS INCREÍBLES

Los funcionarios cubanos que salen al exterior y lanzan declaraciones sobre los cambios emprendidos por el gobierno de Raúl Castro están realmente subiéndole la parada a la historia patria.

[Juan Carlos Frómeta, del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, en una reciente visita a la República Dominicana, concedió una entrevista al periódico “Listin Diario”]. 

Además de balbucear algunas frases de rutina sobre la “revolución en la revolución” que se produce en la isla, el crecimiento del 3.1 por ciento de la economía nacional y la voluntad de Raúl Castro para que el relevo tome pronto las riendas del poder (generosos que son los bisabuelos cuando se cansan de mandar por 50 años), Frómeta pasó a realizar un verdadero aporte arquitectónico que seguramente  inquietó a su compañero de filas partidistas e historiador de La Habana, Eusebio Leal.

Según sus declaraciones, “los cubanos ven como un héroe cubano al general dominicano Máximo Gómez, razón por la que han remodelado la Manzana de Gómez en La Habana, finca donde vivió el general y que ha sido remodelada”.

Al leer esto habrán de detenerse arquitectos e historiadores, porque Frómeta ha cambiado -de un rafagazo verbal- el origen de la histórica edificación de San Rafael y  Monserrate, en pleno corazón de la Vieja Habana.

Una finca en la imaginación


Como siempre supimos, la Manzana de Gómez no debe su nombre al Generalísmo, venerable patricio de las guerras de independencia, sino al acaudalado clan familiar Gómez Mena, dueño de cuatro centrales azucareros y de buena parte de las riquezas del país. El portentoso edificio fue terminado a comienzos del pasado siglo por la ilustre familia, con el impulso de José Gómez Mena Vila, convirtiéndose en el primer centro comercial moderno que tuvo la república. Allí estuvieron ubicados el banco y las oficinas de la compañía azucarera de los Gómez Mena hasta que llegó la revolución de 1959 y ya sabemos lo que pasó.

De "la finca" a que alude el dirigente de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido Comunista no se sabía nada hasta ahora. Hubo allí murallas, pero fueron demolidas hacia 1863. O tal vez se refiera a la vieja quinta de Calabazar de La Habana, [marcada con el # 12 en la calle Meireles esquina a Espada,  construida en los años de 1800, propiedad de unos españoles que emigraron al comenzar la república, fue adquirida por el Generalísimo en 1900 que comenzó a vivir en ella el 1 de agosto de 1900], tras su destitución como General en Jefe del Ejército mambí. En todo caso eso está un poco alejadita de la Manzana en discordia.

Hay que perdonar a Frómeta por este lapso -acaso ocasionado por la influencia de algún profesor emergente- y agradecerle la buena intención de pensar en los patriotas de la independencia antes que en los ricos.

Sea como sea, el disparate echó vuelo y el hombre necesita que le enmienden la plana. Máximo Gómez no necesita de la Manzana para ser grandioso en la historia cubana, ni los Gómez Mena despojados de su mérito como reales fundadores del atractivo lugar. 

Fuente: La mentira de cartón, CafeFuerte.com

FRASE DE SABIDURÍA

Volver la vista atrás es una cosa y marchar atrás, otra. 
- Charles Caleb Colton (1780-1832) Poeta inglés.

1 de diciembre de 2012

LUGARES, YBOR CITY


Círculo Cubano de Tampa en Ybor City

Ybor City
Ana Dolores García

Ybor City  es una ciudad cargada de historia, situada justo al nordeste del centro de Tampa, en La Florida.  Fue fundada en la década de los años ochenta del siglo XIX por fabricantes de cigarros o tabacos. Se nutrió rápidamente de miles de inmigrantes llegados de Cuba, España (principalmente de Asturias) e italianos provenientes en su mayoría de Sicilia, quienes durante la siguiente media centuria llegaron a enrollar  en aquellas fábricas tantas hojas de tabaco como para producir cada año millones de tabacos.   

La ciudad prosperó hasta la gran depresión, durante la cual se redujo tremendamente la demanda mundial de puros de calidad. La II Guerra Mundial contribuyó también a esa decadencia, que se prolongó incluso durante las décadas de los años 1950 y 60 del siglo XX. Pero al principio de la década que marcaría su centenario, Ybor City comenzó a recuperarse como refugio de artistas y, posteriormente, como un paraíso de vida nocturna, tal como lo es hoy.  
    
El área ya ha sido catalogada como Distrito Histórico Nacional y una de sus calles, la Séptima Avenida, considerada siempre como la principal vía comercial de la ciudad, ha sido reconocida entre las diez grandes calles de Estados Unidos por la American Planning Association. Más recientemente, en el año 2010, el histórico restaurante “Columbia” ha sido incluido entre los 50 íconos del giro por la revista “Nation´s Restaurant News”.

Orígenes

Problemas políticos en Cuba y las grandes tarifas aduaneras impuestas por EEUU para el tabaco de importación, motivaron a muchos de los propietarios de las fábricas de tabacos establecidas en la isla a trasladar sus factorías a territorio norteamericano. Primero se radicaron en "Cayo Hueso" (Key West) y la ciudad de Nueva York, pero luego definitivamente montaron sus fábricas en la región de Tampa, puesto que ofrecía mejores condiciones de temperatura y humedad para el procesamiento de los tabacos. 

Uno de aquellos pioneros fue el valenciano Vicente Martínez Ybor, que había fundado en Cuba la marca “Príncipe de Gales”, una de las más cotizadas por su calidad, y que ya llevaba quince años en la isla antes de decidirse a trasladar su fábrica a EEUU a finales de la década de 1860. Importaba las hojas de tabaco desde Cuba y también atraía a numerosos operarios entre los exiliados cubanos. 

En 1885, Martínez Ybor se unió a otro industrial amigo, Ignacio Haya, para dar forma a todo un pueblo dedicado a la fabricación de tabacos. Martinez-Ybor y sus colegas compraron una amplia extensión de terreno contiguo a Tampa, y un año más tarde iniciaron la construcción de las primeras 176 viviendas para los 3000  trabajadores con que ya contaban las diferentes factorías.  Tampa, cuya población en aquel 1886 era de unos 700, se anexó al siguiente año la ciudad que surgía: “Ybor City”.  Sin embargo, el pueblo siempre mantuvo una  identidad distinta. 

Apenas tres años después la población de Ybor City se había duplicado, y aunque la mayor parte de la inmigración era de origen hispano, (españoles o cubanos) a ellos se unieron italianos, alemanes, judíos-rumanos y chinos para trabajar en la confección de los tabacos o fabricar las cajas en que se envasaban o para el comercio, en fin, todo tipo de oficios relacionados principalmente con el producto básico que daba vida a la comunidad: el tabaco. 

Formaron además sociedades étnicas de cultura y recreo. Las más numerosas fueron el Centro Asturiano, el Círculo Cubano, el Centro Español y la Unión Martí-Maceo.  Debido a su proximidad geográfica con Cuba, Ybor city se convirtió pronto en centro de la actividad independentista de la inmigración cubana. Hasta allí fue en 1893 José Martí, artífice y propulsor de la Guerra del 95, a aunar voluntades y conseguir apoyo.  

Había clubes sociales para todos los grupos étnicos. Los cubanos tenían dos, el Círculo Cubano para los cubanos blancos, y La Unión Martí-Maceo, para los negros. El Centro Asturiano era el mayor de todos porque aceptaba miembros de cualquier otro grupo étnico. Aunque en realidad había poca discriminación en Ybor City, las leyes raciales vigentes en Tampa prohibían a los cubanos negros el integrarse en el Círculo Cubano, exclusivo para blancos. En general nunca hubo rivalidades entre los clubes y las relaciones entre los habitantes de Ybor City fueron siempre de carácter amistoso.  

Para 1900, Tampa producía los tabacos de mejor calidad, sobrepasando incluso a La Habana, y a Ybor city se le llamaba “la capital del mundo del tabaco”. La producción de tabacos logró su máxima cifra en 1929, antes del comienzo de la gran depresión. En ese año se elaboraron quinientos millones de tabacos entre todas las factorías de la ciudad.

KING SIZE BED


La primera cama del REY DE REYES

FRASES DE SABIDURÍA

Los buenos momentos hay que fabricarlos, porque únicamente los malos llegan solos.
- Anónimo

30 de noviembre de 2012

JOSÉ LÓPEZ PITEIRA, EL TRIUNFO DE LA FE

  
José López Piteira
el triunfo de la Fe
Por Isabel Orellana Vilches

La divina providencia quiso que este joven cubano viniese a derramar su sangre en defensa de la fe en Cristo en España, la tierra de sus antepasados. 

No es tan mundialmente conocido como otros mártires, pero forma parte por derecho propio de quienes supieron hacer frente con toda valentía a ese postrer instante que se cernía sobre ellos, y generosamente dieron su vida dejando tras de sí un admirable legado de amor. 

Su humilde familia a primeros del siglo XX un día dejó la noble tierra gallega para ganarse el sustento, como hicieron tantos compatriotas. En su equipaje portaban la fe heredada de sus padres como un preciado tesoro que habrían de transmitir a su numerosa prole. 

José nació en Jatibonico el 2 de febrero de 1912 y regresó junto a sus progenitores a España en los primeros cinco años de su vida. Era un niño normal que cursaba estudios en calidad de interno con los benedictinos de Santa María de San Clodio sito en Leiro (Orense) dando así sus primeros pasos hacia la vida religiosa. A buen seguro que sus padres habrían puesto grandes esperanzas en él. Finalizados sus estudios, se integró con los PP. Agustinos de Leganés (Madrid). Profesó con ellos, y prosiguió su formación.

Su futuro apostólico como Vicario Apostólico de Hai Phòng, en Vietnam, estaba ya decidido un año antes de convertirse en sacerdote, momento que aguardaba gozoso. Sus superiores habían vislumbrado en él las cualidades y virtudes que ya iban configurándole como un gran apóstol. 

Se le ha definido con un «carácter bondadoso y tratable, entusiasta y observante». No llegó a partir. Sus sueños se truncaron violentamente al ser apresado el 6 de agosto de 1936 junto a sus hermanos religiosos en medio de la fratricida contienda española. 

El antiguo colegio madrileño de San Antón, que había sido propiedad de los PP. Escolapios donde tantos alumnos fraguaron y compartieron su fe –entre otros Fernando Rielo, Fundador de los Misioneros y Misioneras Identes–, convertido entonces en cárcel, fue el escenario donde se desenvolvieron los preámbulos de su particular calvario.

Cuando llegaron a buen puerto las gestiones realizadas por sus atribulados familiares ante las autoridades cubanas, en un gesto de valentía y coherencia José declinó la oferta de su liberación. Y su temple apostólico lleno de caridad se puso de manifiesto en su inquebrantable voluntad de dar hasta el final los mismos pasos de sus hermanos en religión:

 «¡Prefiero seguir la suerte de todos, y sea lo que Dios quiera!», determinó con rotundidad dispuesto a cumplir la voluntad divina. Los rostros de sus superiores y formadores le contemplaban conmovidos. Y con ellos compartió numerosos sufrimientos en cerca de cuatro meses marcados por las privaciones y angustia, hasta que entregó su alma a Dios en Paracuellos del Jarama (Madrid). 

Fue fusilado el 30 de noviembre de 1936, junto a otros 50 religiosos agustinos, exclamando: «¡Viva Cristo Rey!» al tiempo que renovaba el supremo acto de perdón aprendido del Maestro hacia quienes le privaban de su vida pero le abrían las puertas del cielo. Fue beatificado el 28 de octubre de 2007.
Recogido de Zenith.com
Enviado por Sonia Agüero

OTORGAN PREMIO TOLERANCIA PLUS A SACERDOTE CUBANO



Otorgan Premio Tolerancia Plus
a sacerdote cubano

Juan Carlos Chavez,
El Nuevo Herald, Miami

Activistas e integrantes de la disidencia interna cubana homenajearon al sacerdote José Conrado Rodríguez con el premio “Tolerancia Plus” en reconocimiento a su compromiso y defensa de las libertades individuales, entre otros. Conrado, una de las figuras católicas más críticas del gobierno cubano, es párroco de la Iglesia de Santa Teresita del Niño Jesús, en Santiago de Cuba.

“Me siento un poco abrumado”, dijo Conrado en una entrevista telefónica a El Nuevo Herald. “Cuando recibo premios siempre tengo la sensación de que se equivocaron de destinatario. El contexto de la entrega del premio ha sido muy emocionante”.

Conrado, de 60 años, recibió el galardón en una ceremonia realizada a inicios de semana en la casa del opositor Antonio G. Rodiles, director del movimiento independiente Estado de Sats, en La Habana. Rodiles fue excarcelado en horas de la tarde del lunes, 19 días después de su arresto durante una violenta represión de la policía política cubana.

Reproducido del blog
http://cjaronu.wordpress.com/