5 de junio de 2012

PUNTOS DE VISTA



PUNTOS DE VISTA

Por Elsa M. Rodríguez

Cada cual opinamos desde la perspectiva de nuestra situación referente a determinados asuntos. Por ejemplo, se dice que los cubanos de la isla ya no hablan tanto de democracia y capitalismo porque están más contentos desde que el heredero-dictador les ha permitido a algunos convertirse en cuentapropistas, que por lo que se ve no es otra cosa que tener permiso para abrir algún que otro "paladar" o convertir la casa en una pensión, no se sabe si para turistas extranjeros o el turismo del cubano-americano que va de visita a la isla.

En su periplo por los Estados Unidos, la "hijísima" del heredero-dictador opina libremente que si ella fuese ciudadana estadounidense, votaría a Obama para presidente, ella puede decir lo que quiera porque claro no está en Cuba y además ella tiene patente de corso para viajar, opinar, comprar, etc. Habría que saber la opinión de los súbditos de su padre quienes no pueden votar por nadie más que por el candidato único que le ponen en las listas cada vez que realizan la pantomima de unas elecciones.

Que Mariela guste de Obama no nos puede sorprender, porque este presidente ha hecho todo lo que ha estado a su alcance para congraciarse con el gobierno dictatorial de la familia Castro. Comenzó con la falsedad de un Intercambio Cultural, donde lo que se ve es la llegada a tierras de este país de artistas que indiscutiblemente son incondicionales del régimen porque así lo han demostrado tanto dentro como fuera de Cuba.

Ningún artista cubano-americano ha sido invitado a actuar en Cuba. Actualmente las emisoras de televisión locales nos machacan constantemente con la actuación o la entrevista de alguno de esos "artistas" del intercambio. Claro que hace rato ya que estas emisoras nos machacan con las peliculitas hechas bajo la dictadura así como con la presencia en los programas de entrevistas para tratar de asuntos relacionados no solamente con Cuba sino con el resto del mundo, a personajes que de pronto se han convertido en expertos en política, en filósofos y sobre todo en tratar de demostrar que el exilio histórico está equivocado y que es hora ya de iniciar un diálogo con el gobierno cubano.

Pero bueno, no podemos o no sabemos como hacer para ponerle el cascabel al gato y así nos siguen tomando el pelo y una niñita que no tiene la menor idea de lo que han pasado generaciones de cubanos anteriores a ella se da el lujo de opinar que "el proceso electoral -en Cuba (que risa)- podría ser más democrático todavía".

Como vemos hay muchos puntos de vista, el mío de momento es que hay mucha gente descarada que se cree que pueden bailar en casa del trompo, y esta Marielita es una de ellas, porque hablar de democracia en Cuba cuando allí hace más de medio siglo que existe una dictadura tiránica, es más que una burla, una falta de respeto.

Elsa M. Rodríguez
Hialeah, FL

LA GUERRA ANGLO-ESTADOUNIDENSE DE 1812



La batalla del lago Erie, por William H. Powell
 
La Guerra Anglo-Estadounidense
De 1812

Dentro de pocos  días se cumplirá el segundo centenario del inicio de una de las guerras mas desconocidas de la Historia: la Guerra Anglo-Estadounidense de 1812.  

Las raíces de esta contienda se encuentran en las relaciones comerciales entre la Francia imperial y los Estados Unidos. En 1807 Gran Bretaña impuso un severo bloqueo naval a la Francia de Napoleón, lo cual afectó grandemente a las antiguas colonias británicas devenidas desde hacía poco más de tres décadas en nación independiente, ya que Francia demandaba el 80% de las exportaciones de algodón de los Estados Unidos y el 50% de todas las restantes. Este es el motivo por el que, pese al bloqueo naval, los mercantes americanos siguieron comerciando con Napoleón, suscitando  la ira del gobierno británico.

La política británica respecto a los infractores del bloqueo consistía en la confiscación de toda la carga útil y, en el caso de los marinos estadounidenses, el enrolamiento forzoso de parte de la tripulación en la armada real. Cada vez mas embarcaciones norteamericanas eran apresadas por la armada británica y esto causó un gran malestar en la república norteamericana, por lo que el 18 de junio de 1812 el presidente James Madison, presionado por importantes grupos expansionistas y aprovechando la difícil situación bélica que atravesaba el Reino Unido, ocupado por entonces en la guerra peninsular española (1808-1814), declaró formalmente la guerra a Gran Bretaña.

Mientras, Canadá seguía siendo territorio británico y se convirtió en el objetivo de las primeras acciones bélicas de los Estados Unidos. Las fuerzas canadienses no podían esperar a corto plazo refuerzos de la metrópoli y reclutaron fuerzas indígenas como mercenarios. Durante los primeros meses de la contienda los americanos se centraron en atacar los principales núcleos de población de la frontera de Canadá, como York o Toronto, pero estos intentos por ocupar las plazas fueron repelidos por las milicias locales.

Ante la resistencia canadiense, y como consecuencia de un nuevo bloqueo naval que no tardaría en dañar seriamente su economía, los Estados Unidos optaron por una estrategia mas defensiva y trataron de romper el bloqueo que la armada real les había impuesto. La marina americana cosechó algunas victorias frente a los británicos -como la del Lago Champlain (11 de septiembre de 1814)-, pero no logró romper el bloqueo comercial en el Atlántico.

Después de recluir a Napoleón en la isla de Elba, los británicos pudieron destinar refuerzos a la lucha contra Norteamérica y lanzar ofensivas terrestres en el interior de Estados Unidos. El 24 y 25 de agosto de 1814 una fuerza expedicionaria británica derrotó sin problemas a las milicias que defendían Washington DC, y lograron incendiar y saquear la ciudad, incluidos algunos edificios emblemáticos de la capital, como el Tesoro o la Casa Blanca, poniendo en fuga al presidente Madison y su gabinete. Poco después algunas localidades del estado de Maine corrieron la misma suerte. Esto forzó a los Estados Unidos a intentar negociar el fin del conflicto con sus enemigos europeos.

La paz se alcanzó finalmente con el tratado de Gante (Bélgica, 24 de diciembre de 1814). El tratado contemplaba la restauración de las relaciones entre los dos países y la vuelta al status quo ante bellum. Sin embargo, la distancia geográfica con la zona de conflicto impidió que las noticias sobre el armisticio llegasen antes de la batalla de Nueva Orleans, el último escenario de la guerra. El 23 de diciembre de 1814 la flota británica cerró el puerto y la desembocadura del Misisipi e inició un intenso bombardeo sobre la ciudad.

Los ataques contra las posiciones americanas fueron constantes, pero la milicia estadounidense consiguió mantener el control sobre la plaza. Estos ataques se prolongaron hasta el día 8 de enero, día en el que la noticia de la firma del tratado de Gante llegó al frente y cesaron las hostilidades.

Cabe destacar que durante el trascurso de la batalla de Nueva Orleans el poeta americano Francis Scott Key compuso su famoso poema “The Star-Spangled Banner”, que sería ratificado como himno oficial de Estados unidos en 1931; además se encumbró la imagen del general Andrew Jackson, que llegaría a la Casa Blanca en 1829 como el séptimo presidente de los Estados Unidos.

http://historiaesco.blogspot.com


Oliver Hazard Perry después de la batalla del lago Erie, por William H. Powell.

FRASE DE SABIDURÍA

Un hombre es bueno cuando hace mejores a otros
- Proverbio ruso

4 de junio de 2012

MAS DE UN MILLÓN DE BRITÁNICOS ACLAMAN A ISABEL II




 
Mas de un millón de británicos
aclaman a la Reina
al paso de la “flotilla” del Jubileo

Mas de un millón de británicos han aclamado a la Reina al paso de la “flotilla” del Jubileo de Diamantes en el río Támesis y bajo un cielo típicamente londinense. La lluvia no ha aplacado sin embargo los ánimos de los admiradores de Isabel II, distinguida por un sondeo de YouGov como la monarca más popular de la historia.

Vestida en tonos claros, por aquello de "iluminar" lo gris del día, y arropada casi en todo momento por Camila y Kate a bordo  de la barcaza real, “Spirit of Chartwell”, la Reina ha recibido el mayor baño popular desde su llegada al trono hace 60 años.  

El desfile flotante del Támesis, compuesto por mil embarcaciones a lo largo de 11 kilómetros, estaba organizado en diez grupos, divididos por barcazas que le dieron un contenido "histórico" al recorrido. Entre las interpretaciones clásicas y la música del folclore inglés, se unieron melodías más modernas, como la banda sonora del James Bond al paso de la comitiva por el "nido de espías" del M-16.

Los componentes de la orquesta filarmónica de Londres no dudaron en cantar “Land of Hope and Glory” y el himno nacional, entre otros, a pleno pulmón y bajo la lluvia, subidos en la cubierta de uno de los barcos. Fue, sin duda, uno de los momentos más emotivos y sirvió para concluir el desfile.

Como nota curiosa, el libro Guiness de los récords ha confirmado que el desfile fluvial ha batido el récord mundial por el número de embarcaciones que han participado.

Al paso por los 13 puentes en el centro de Londres, la comitiva ha sido saludada por una masa compacta que se estrelló sin remedio contra el muro policial a la altura el Big Ben (rebautizado como la Torre de la Reina) y el puente de la Torre de Londres, los dos puntos más concurridos de todo el recorrido.

La procesión flotante del Támesis llegó precedida de más 10.000 fiestas callejeras (el doble que cuando se casaron Guillermo y Kate hace un año). Las más concurridas fueron seguramente las que se celebraron en Picadilly Circus, en Hyde Park y Battersea Park, donde más de 100.000 personas siguieron en pantallas gigantes el evento.

Mañana, por cierto, los viejos rockeros británicos rendirán un tributo musical a la Reina en un marcoconcierto desde Buckingham, con los Madness cantando “Our House en el tejado” y Sir Paul McCartney, Sir Tom Jones y Sir Elton John rindiéndole pleitesía entre muchos otros desde el escenario.

Los festejos del Jubileo acabarán el martes con la procesión por las calles de Londres y el espectáculo aéreo que llenará los cielos de Londres del chorro tricolor de la union jack (blanco, azul y rojo) que estos días lo inunda todo.
Reproducido de elmundo.es